Puerto Morelos, hundido en carencias

Por Jazmín Ramos

En lo que va de la actual administración de la alcaldesa Laura Fernández Piña, en Puerto Morelos han invertido en obra pública 150 millones de pesos del presupuesto anual para 2020, que asciende a 378 millones 883 mil 458 pesos. Sin embargo, los rezagos en infraestructura urbana y social persisten en 45 por ciento de la población (18 mil habitantes). De las obras realizadas, se han asignado dos contratos a Maxiled, propiedad de Carlos Alberto Moyano Menchaca, esposo de la edil.

Las obras endilgadas a Maxiled corresponden a la remodelación y construcción de la plaza cívica y andador peatonal en el parque del Casco Antiguo, donde hace días demolieron un histórico kiosco, así como en colocaciones de luminarias y alumbrado público para las calles principales; en esas dos transacciones se liberaron 39 millones de pesos.

De estos contratos no hay información pública en la página de la Dirección de Transparencia y Acceso a la Información Pública, ni tampoco de las obras realizadas en esta administración, destinadas a la infraestructura urbana y social.

Además, tampoco hay claridad sobre qué empresa realiza la recolección de la basura, pues el año pasado la concesionaria del servicio, Bios Servicios Ambientales S. A. de C.V., demandó a la comuna por 4 millones de pesos por no respetar el contrato.

Gastos en personal de confianza

Asimismo, en la Cuenta Pública de su primer año de gobierno, Fernández Piña destinó para el pago de mil 180 trabajadores de confianza, más de 35 por ciento del presupuesto de las partidas federales, cuyo monto global asciende a 90 millones de pesos, sin hacer una consulta al cabildo.

La Auditoría Superior de la Federación (ASF) le requirió a la alcaldesa un informe sobre esos gastos en febrero del año pasado, pues desvió de esa partida el pago de 24 quincenas a personal que no está registrado en Recursos Humanos.

Ante la opacidad en el ejercicio de los recursos, organizaciones sociales como Transparencia Puerto Morelos han iniciado una investigación sobre el manejo del erario, pues a pesar de que anuncia inversiones en obra pública, estas no se ven reflejadas en el entorno de la ciudad.

Carlos Ángel Hernández Saldaña, integrante de ese colectivo, señaló no sólo opacidad, sino también nepotismo, ya que dos de las obras que se llevan a cabo en el primer cuadro de la ciudad fueron asignadas a su esposo.

“Hicimos la solicitud a la unidad de transparencia sobre las obras que actualmente se realizan en el municipio, por el tema de la basura y la deuda pública, así como por la abultada nómina que tiene el Ayuntamiento, que es de casi mil trabajadores, pero no respondieron, entonces acudiremos al órgano garante, porque tiene la obligación de rendir cuentas”.

Obras sin transparencia

Dijo que la munícipe ha hablado en los medios sobre la ejecución de obras que ascienden hasta 150 millones de pesos, en bacheo, pavimentación, construcción de banquetas, guarniciones, alumbrado público, equipamiento a la policía y renta de patrullas; pero de todos esos contratos no hay información en las páginas de Transparencia, aduciendo que no son sujetos obligados.

Hernández Saldaña aseguró que desde el primer trienio de Laura Fernández ese ha sido su proceder: la opacidad como primera línea, mientras la ciudadanía enfrenta carencias en las colonias populares; incluso la delincuencia se incrementó, y eso es fácil de comprobar haciendo un recorrido por los asentamientos, en donde carecen de drenaje, y en algunos casos no hay agua potable, las calles están llenas de baches y no hay alumbrado, sin contar la falta de infraestructura educativa y hospitalaria.

18 mil habitantes enfrentan carencias

Estimaciones de la Comisión Estatal de la Población en Quintana Roo indican que en Puerto Morelos, un total de 18 mil habitantes tienen algún tipo de carencia, mientras que cinco mil viven en pobreza; sobre todo en las zonas rurales, donde no les garantizan los niveles mínimos de bienestar.

Los rezagos que enfrentan los portomorelenses van desde calles en mal estado, falta de alumbrado, limitada estructura educativa y del sector salud, deficiencias en el transporte público, inseguridad, así como irregularidades en los servicios básicos.

De acuerdo con el Plan de Desarrollo Urbano de Benito Juárez 2016-2018, antes de que Puerto Morelos se considerara municipio, para cubrir las necesidades de infraestructura urbana y social se requerían al menos mil millones de pesos para atender las necesidades de esa jurisdicción; actualmente la cifra no está actualizada, porque este instrumento no se encuentra disponible a la opinión  pública.

No obstante todas esas carencias, Fernández Piña ha anunciado obras por 150 millones de pesos y el 8 de mayo de 2020 informó la aplicación del Programa de Inversión Anual (PIA); un proyecto con el que, dijo, seguirá abatiendo los rezagos del municipio.

La alcaldesa estima invertir 40 millones de pesos en la primera fase de pavimentación y colocación de alumbrado público en las colonias La Fe y Tierra Nueva. Pero de estas obras tampoco se tiene información en la plataforma de Transparencia; sólo se sabe que ese techo financiero fue aprobado durante la Quinta Sesión Ordinaria del Comité de Planeación para el Desarrollo Municipal (Coplademun).

Ciudadanos reclaman falta de apoyos

El ciudadano Carlos Hernández, del fraccionamiento Villas las Playas, señaló que aún cuando la alcaldesa anuncia obras, estas no se llevan a cabo o sólo se ejecutan en el primer cuadro de la ciudad, no en las colonias, de tal suerte que la mayoría carece de alumbrado público, pavimentación y drenaje; además, dijo, en los últimos años aumentó la delincuencia.

“Desde que llegó Fernández Piña sólo se enfocó en el área turística; en el pueblo no se tiene obra, destacando el problema de la basura, que no se tiene un servicio eficiente y además no hay contenedores”.

Asimismo, Karina Girón Chávez, de Villas Puerto Morelos, mencionó que la ciudad sigue igual que antes que se convirtiera en municipio; las carencias persisten, en campaña la alcaldesa se comprometió a realizar las gestiones para la construcción del hospital y hasta la fecha no se tiene información al respecto. “Ya ni no es posible tener un hospital, al menos una clínica de salud adecuada, lo que tenemos es un dispensario médico, que no tiene ni lo básico para operar; entonces terminamos acudiendo a Cancún y a Playa del Carmen para recibir atención”.

También Berenice Rocha, quien tiene más de cinco años viviendo en Puerto Morelos, aseguró que la obra pública no se ve reflejada en las colonias; hay rezagos en drenaje, pavimentación e infraestructura.

“Se nos hace injusto que la alcaldesa destine 19 millones de pesos en la zona turística, mientras que las colonias continúan en las mismas condiciones que antes de que fuera municipio, cuando pagamos impuestos, además no se tiene certeza de bajo qué término se asignaron los recursos para la remodelación, que ha ocasionado informidad entre los pobladores”.

Autoridades no resuelven problemas de la población

Ante ello, Fabiola Cortez Miranda, de Somos Tus Ojos Transparencia por Quintana Roo, mencionó que las inconformidades que ha generado la remodelación y construcción de la plaza cívica y andador peatonal en el parque del Casco, es una muestra de que las autoridades no toman en cuenta la población en el quehacer público; ellos desde su escritorio deciden qué hacer, dejando a un lado las necesidades reales, como abatir el rezago de la infraestructura urbana y social.

“Pero aunado a que determinan obras ajenas a la realidad, tampoco informa bajo qué términos se licitaron y qué empresas las desarrollan; es decir, que actúan en la opacidad, que no es otra cosa que corrupción. Y si bien esta situación no es privativa de Puerto Morelos, sino de todos los municipios, en esta jurisdicción es donde hay menos transparencia”, acusó.

Bajo esa consideración, adelantó que en conjunto con la organización Transparencia Puerto Morelos, están trabajando en varios frentes para acceder a la información que se ha negado, bajo el argumento de que no son sujetos obligados o porque se clasificó como “no disponible”.

 :::::::::::::::::::::::::::::::::::::::De 40 mil habitantes, hay 18 mil con necesidades sin resolver

* El municipio está conformado por Leona Vicario y Central Vallarta, zonas rurales de esa demarcación; en conjunto se estima que existen 40 mil habitantes.

* La zona urbana está conformada por la Región 17, 18 y 23 de enero, la colonia Pescadores, Punta caracol, Casco antiguo, Villas Morelos I y II, así como Villas las playas.

Datos  

Los colonos reclaman el favoritismo de las autoridades, pues primero le dan servicio a la zona hotelera y dejan para lo último las colonias populares

Deficiencias en servicios  

45% de las colonias

del municipio carece de infraestructura urbana y social

Basura

1 vez a la semana

pasa el servicio de recolección de basura, pues cuentan sólo con un camión recolector de desechos sólidos que no se da abasto para cubrir el municipio

Educación

23 escuelas

hay para Puerto Morelos, Central Vallarta y Leona Vicario, y sólo abarcan el nivel medio superior; no hay planteles universitarios

Salud

2 clínicas

de los Servicios Estatales de Salud (Sesa) y un módulo del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), pero no hay consulta las 24 horas.

*El gran reto es la construcción de un hospital en Puerto Morelos y otro en Leona Vicario con equipamiento para análisis clínicos y estudios médicos.

Seguridad

40 elementos en activo, con residencia local y actualmente está en formación del cuerpo policial

4 radiopatrullas

y cinco motopatrullas

Obra polémica, en manos de esposo de edil  

La empresa Maxiled, de Carlos Alberto Moyano Menchaca, esposo de Laura Fernández, tiene a su cargo dos contratos de obra pública:

1.- Remodelación y construcción de la plaza cívica y andador peatonal en el parque del Casco Antiguo, donde hace días demolieron un histórico kiosco.

2.- Colocación de luminarias y alumbrado público para las calles principales