Se registran bajas ventas de pescados y mariscos hasta en un 50 por ciento en el mercado público “Alonso Felipe de Andrade” (AFA), los locatarios declaran sentirse un poco desanimados, ya que tienen que cubrir pagos pero no les alcanza con sus pocas ganancias. El locatario Miguel Ángel Magaña lleva ya 30 años en el mercado; sin embargo, es uno de los que atraviesan por esta dura situación, debido a que sus ingresos han bajado más de lo normal desde el inicio de la contingencia por COVID-19 en la isla. “Cuento con dos empleados, por el momento no se les paga de manera normal pero tampoco se quedan sin un sustento, ellos tienen a su familia y estoy consciente de que no pueden quedarse sin trabajo”, comentó don Miguel. Por otra parte, los precios se mantienen, no han subido ni bajado, esto de alguna manera los ayuda a vender sus productos aunque sea lo mínimo. El precio del kilogramo de mojarra se encuentra en 60 pesos, el robalo en 120 pesos y el del camarón en 160 pesos. Para mantener las medidas sanitarias correspondientes, los locatarios usan su cubrebocas y brindan gel antibacterial para prevenir a toda costa algún contagio, pues es necesario contrarrestar el alarmante brote de COVID-19 en el municipio carmelita.
(Texto y fotos: Rocío Mateo)