INAH, 'de brazos cruzados”

De la Redacción

TULUM, 1 de junio.- Por la situación de la mansión construida dentro del Polígono de Monumentos Arqueológicos y el Parque Nacional Tulum, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) no tiene respuesta sobre la inspección ni denuncia contra el propietario de la obra.

El Por Esto! de Quintana Roo buscó a Alan Maciel, jefe de operación de la Zona Arqueológica de Tulum, por vía telefónica para obtener información acerca de las medidas que se iban a tomar respecto a esta residencia edificada en un Área Natural Protegida (ANP), pero como respuesta dijo que no los dejaron ingresar al predio, puesto que hay gente armada en el lugar que simplemente no les dejó acceder.

Reconoció estar en conocimiento del caso por medio de fotografías dadas a conocer por diversos medios locales y nacionales, pero no han podido constatar la obra pues no se les permitió ingresar.

Ante ello, se le preguntó a la dependencia federal sobre si han recurrido alguna instancia de mayor facultad para tramitar alguna orden jurídica para autorizar el ingreso y hacer la inspección, de lo cual se tuvo como contestación que no se ha hecho tal acción.

De igual manera, se les cuestionó sobre si habían interpuesto alguna denuncia ante las autoridades correspondientes, respondiendo que no tienen el nombre de la persona o la sociedad propietaria del inmueble, pese a que ese dato se puede obtener ante el Registro de la Propiedad.

Caber recordar que el propio INAH había dado a conocer que el personal del área de seguridad iba hacer un recorrido en la zona para verificar los daños a la naturaleza toda vez que de acuerdo a un documento de expropiación, no se puede construir dentro de un polígono de 664.32 hectáreas desde 1981.

En días pasados se dio a conocer que en recorrido personal de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) constató que la mansión estaba casi completamente construida e incluso bajo resguardo de personal de seguridad privada armada.

Se dice que dicha obra está contraviniendo un decreto presidencial del 8 de diciembre de 1993, donde declara el sitio como Zona de Monumentos Arqueológicos Tulum-Tankah, y aumenta la superficie de la poligonal a 692 hectáreas, emplazada sobre un acantilado junto al mar, que preserva alrededor de 33 mil vestigios.

Aunado a ello violentaría un acuerdo de destino registrado el 15 de diciembre de 2007, a favor de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), que le confiere la administración de 184 mil 409 metros cuadrados de la zona federal marítimo terrestre, adyacentes al PNT, para efectos de protección y conservación ambiental, especialmente de la tortuga marina.

De igual manera, la Conanp señala que quebranta las disposiciones de la Mega Reserva del Caribe Mexicano, Área Natural Protegida (ANP) decretada como tal, el 7 de diciembre de 2016, invadiendo una subzona no apta para el desarrollo urbano, que está sujeta a protección y conservación de las playas en incluso de la zona rocosa intermareal, como ecosistema de “importancia alta” para la flora y la fauna nativas.