La parroquia San José Obrero y de San Patricio de Irlanda después de tres meses de estar cerradas para las misas presenciales, hoy el sacerdote Patrick Corrigan Cummins, L. C., abrió las puertas para la celebración eucarística de la tarde noche con una ocupación del 30 por ciento de su capacidad .
Desde el viernes 20 de marzo de 2020 se suspendió la celebración de la misa en toda la Diócesis con asistencia del pueblo. Así como reuniones, retiros, conferencias, misiones y catecismos, por la pandemia del coronavirus COVID-19.
Aunque las iglesias ofrecieron las misas dominicales a través de las redes sociales, pero hoy al estar en semáforo estatal de riego epidemiológico en color naranja permite la reunión en las capillas en un 30 por ciento de su capacidad.
Antes de la misa el sacerdote Patrick Corrigan Cummins, L. C., informó que se desde temprano se hizo el proceso de limpieza y sanitización de la Parroquia, el cual fue dirigido por una enfermera y sus familiares que aportaron los insumos.
Así también los coordinadores de apostolados estuvieron presentes. Hoy se abrieron las puertas de la Parroquia a las 6:30 p.m., y la recomendación fue usar cubre bocas y de ponerse gel antibacterial.
Las bancas tienen marcado los espacios a ocupar y se dispuso de personas encargadas para hacer respetar la sana distancia en todo momento. ¡Dios les bendiga!, concluyó.
Con información de Luis Enrique Tuz
Por Redacción Digital Por Esto!
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