Quintana Roo

Cambian puesto de tacos por venta de cubrebocas en Chetumal

El COVID-19 los obliga a buscar nuevas fuentes de ingreso en Chetumal
Ven en la crisis una oportunidad de negocio

CHETUMAL.- Nury García ha encontrado en la venta de cubrebocas una oportunidad de conseguir un ingreso para su familia, ya que la necesidad de sacar adelante a sus dos hijos adolescentes la motivan a colocar su puesto ambulante en el cruce de la avenida Maxuxac con Nicolás Bravo.

Acompañada de su esposo Emanuel Poot, Nury García tuvo que cerrar su taquería, pues la pandemia por el coronavirus COVID-19 hizo que las ventas bajaran al punto de ya no obtener ganancias, lo que la obligó a cerrar definitivamente y buscar ingresos para solventar los gastos de su familia.

“Pensamos en vender cubrebocas porque es lo que la gente necesita en este momento.  Intentamos poner un local fijo para la venta, pero representantes del municipio nos dijeron que no dan permiso para eso, por lo que tuvimos que improvisar un puesto ambulante para poder vender nuestra mercancía”, comentó.

Nury y Emanuel, ambos de 40 años, acuden todos los días desde la mañana al Oxxo ubicado en la avenida Maxuxac con Nicolás Bravo para ofrecer su mercancía a niños y adultos e para impulsar el cuidado de la salud, además de prevenir que se extienda esta pandemia, pues es algo que afecta a toda la población de la capital.

“Sí se vende lo suficiente para mantener a la familia.  Somos muchos los que estamos así.  Si me gustaría que el municipio nos otorgue permiso para poder poner un local fijo y no estar en la calle bajo el sol, eso nos ayudaría mucho y creo que venderíamos más, pero hasta ahorita no hemos recibido este apoyo”, explicó Nury García.

La madre de familia resalta el doble gasto que tiene que hacer con sus dos hijos, pues ambos acuden a la universidad, donde están cursando diferentes licenciaturas, además saca únicamente una ganancia exacta para el gasto diario de la casa en alimentos e higiene de su familia.

“Hemos trabajado por muchos años en las ferias, pero como nuestros hijos crecieron nos establecimos en Chetumal para salir adelante.  Tratamos de checar lo del permiso en el municipio, pero los de Fiscalización nos dijeron que no le dan permiso a nadie, sólo en eso nos gustaría que nos apoyen porque queremos trabajar bien, ese es nuestro malestar porque ahorita está difícil la situación”, finalizó.

Por Ángel Abraham Ramón González