Por Luis Enrique Cauich
PUERTO DE CHIQUILÁ, 2 de junio.- Con el inicio de la “Nueva Normalidad” y la activación de la producción pesquera como actividad esencial, los pescadores ahora enfrentan las afectaciones por el mal tiempo que aqueja la península de Yucatán, el cual ha impedido a los hombres de mar el salir a trabajar.
Celestino Ramírez, pescador de Chiquilá, sostuvo que en poco más de dos meses, el coronavirus causó serios estragos a los pescadores, puesto que tuvieron que permanecer en casa y sólo salían en busca de escamas para alimentar a sus familias, pero consideró que ahora es necesaria la reactivación de la producción.
El pescador comentó que más que mantenerse en casa, la falta de permisos para salir a vender sus productos a mercados cercanos fue la afectación más severa, debido a que en los filtros se impedía salir del pueblo y luego del municipio, así también el ingreso de los compradores.
Eso ocasionó que también haya personas que ahora se estén aprovechando de la necesidad del pescador, comprando los productos a mitad de precio, además de que si lo venden en los poblados cercanos sería la misma situación, ya que la pandemia ha dejado sin recursos a los habitantes y hay que bajarle al productor para ayudarlos y así ayudarse a sí mismos con un poco de venta.
Ahora la afectación es natural, el sistema climático que está afectando el municipio, mantiene cerrado el puerto a la navegación por la lluvia y los fuertes vientos, de modo que a dos días de haber iniciado la “Nueva Normalidad”, los pescadores se mantenían sin poder salir a trabajar.
Comentó que sólo se espera que las condiciones climáticas mejoren, así también que con la activación de esta actividad esencial, se les permita poder llevar sus productos a Cancún y la Riviera maya, para ir poco a poco mejorando la economía de sus familias y buscar recuperarse de las afectaciones que ha dejado la actual pandemia.