Autoridades rebasadas

Por LusioKauil

JOSÉ MARÍA MORELOS, 7 de junio. – Las autoridades municipales mostraron esta vez que no están preparadas para articular acciones orientadas a apoyar a la población en casos de emergencia, dijo ayer el señor Bernardo Caamal Itzá, ingeniero agrónomo y estudioso del clima en la región.

Indicóque, por desgracia, en muchos municipios, los encargados de Protección Civil son personas que no tienen conocimiento del cargo que ostentan, porque los ponen allí por cuestiones políticas.

Manifestó que esta vez las autoridades se enteraron de que las comunidades se estaban inundando, porque la propia gente subió en las redes sociales las imágenes de los que estaba pasando.

“Esta situación mostró que ellas fueron rebasadas, porque no actuaron a tiempo, a pesar de que sabían que en junio empezaba la temporada de ciclones en Atlántico, Caribe y Golfo de México”, dijo.

Comentó que en esta zona existen estaciones de radio y a través de ellas Protección Civil debióalertar a las comunidades de que se acercaba mal tiempo, para que tomaran sus precauciones, pero no se hizo y, por tanto, expresó, los poblados quedaron descobijados.

Esto, puntualizó, no solamente fue el caso de José María Morelos, “sino que es una situación que se vivió en todos los municipios de la Península de Yucatán”.

Manifestó que las autoridades estaban más ocupadas por lo del COVID-19, pero estono es pretexto para trabajar en una serie de acciones en las comunidades, como dotar de agua a los refugios anticiclónicos y habilitar espacios para que puedan albergar a la población.

El inicio de la temporada

El domingo 31 de mayo llovió fuerte por la tarde y parte de la noche, como efecto de la depresión tropical “Amanda” que se encontraba en el Pacífico.

El lunes continuó la lluvia y al mediodía arreció; se mantuvo así hasta aproximadamente las 16:00 horas. A esa hora, varios poblados de la zona poniente del municipio, como Saczuquil, Othón Pompeyo Blanco, Puerto Arturo, Sabán, Huay Max empezaron a subir gráficas en las redes sociales en las que se mostraban las inundaciones que ya estaban causando las lluvias.

Por la noche, el ayuntamiento emitió un boletín de prensa, en donde ya daba a conocer queProtecciónCivil estabaatendiendo a las comunidades que habían sido afectadas por las lluvias provocadas por los remanentes de “Amanda”.

El martes 2 de junio se mantuvo todo el día con llovizna. Protección Civil dio a conocer ese día que había salido a la zona rural para ver en qué situación se encontraban los poblados afectados por la lluvia y por los escurrimientos que ya empezaban a registrarse en las zonas bajas.

El martes 3 de junio se llevó apoyo a varios poblados que estaban afectados, pero no hubo alguna acción orientada a acondicionar los refugios en caso de alguna situación de emergencia posterior.

El jueves 4 se mantuvo la llovizna todos los días y, hasta donde se sabe, Protección Civil volvió a salir a campo, y a su regreso participó en la instalación, hasta ese momento, delSubcomité Operativo para la Atención de Fenómenos Hidrometeorológicos.

En la instalación de ese órgano Operativo, Protección Civil dio a conocer que en el municipio existen 78 refugios anticiclónicos con capacidad para albergar a siete mil 500 personas. No se mencionó si los refugios contaban con servicios básicos y estaban equipados con colchonetas para poder albergar la gente en caso de que las circunstancias lo requirieran.

La madrugada del viernes se desataron las lluvias más fuertes que se hayan registrado hastaentonces, por la acción de la tormenta tropical “Cristóbal”. Al amanecer mucha gente de las comunidades rurales empezó a compartir fotos en donde se veían losestragos que había dejado el temporal, tanto en la zona urbana de las comunidades como en los campos de cultivo. Según Protección Civil, en toda la geografía municipal estaban afectadas poco más de 25 comunidades.

Ese día, Protección Civil acudió a varios poblados para romper calles, desazolvar drenajes para que el agua que inundaba casas y áreas publicas de las comunidades pudiera escurrir fuera del poblado.

En algunas localidades, la gente tuvo que salir de sus casas ya inundadas para ir a refugiarse en algún lugar seguro. Por ejemplo, en el poblado Benito Juárez, don Bartolo Álvarez y su esposa, se fueron a guardar a la subdelegación, porque el agua llegó a un metro dentro de su cocina y en el cuarto donde dormían.

Bernardo Caamal Itzá manifestó que lo que sucedió esta vez debe servir como una poderosa llamada de atención a las autoridades de Protección Civilestatal y municipales,“para que trabajen de manera conjunta y articulen acciones para poder enfrentar emergencias por lluvia o por huracanes”.

Indicó que los directores de Protección Civil deben trabajar en la responsabilidad que les corresponde y no esperara que la autoridad municipal les diga qué es lo que tienen que hacer, “pero para ello la autoridad municipal tienen que delegarles responsabilidades, como debe ser toda autoridad que representa los intereses del pueblo”, concluyó.