JOSÉ MARÍA MORELOS,- Una autoridad ejidal de la zona de Los Planes, reveló que en fechas pasadas le hicieron firmar un documento en donde se da a conocer que este año el Gobierno del Estado no va otorgar ningún tipo de apoyo, por siniestro, para la actividad agrícola.
Indicó que el documento fue enviado por la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca, y se presume que fue firmado por otras autoridades ejidales del municipio.
Según el comisariado ejidal, José Antonio Pacheco Novelo, el argumento que maneja la dependencia es que el Gobierno del Estado no tiene dinero para apoyar la actividad agropecuaria, porque el gobierno federal no le está dando recursos.
Comentó que hasta donde tienen conocimiento, el Gobierno del Estado tienen su propio presupuesto para el campo, al igual que el gobierno federal, y por lo tanto, cada nivel debe tener recursos para apoyar la actividad agropecuaria, sobre todo, abundó, en estos tiempos difíciles.
Expuso que, si el Gobierno del Estado no quiere apoyar al campo, no quiere decir, por ello, que la actividad agrícola se paralice, por el contrario, “vamos a acudir a la solidaridad entre productores, para poder salir adelante”, manifestó.
Recordó que, cuando el gobernador actual asumió la responsabilidad de conducir los destinos de Quintana Roo, pensaron que las cosas iban a ser distintas; pero hasta ahora, observó, lo que se ha visto es que no habido nada diferente al anterior gobierno, por el contrario, el actual “…nos está dejando morir en la raya”, señaló.
La autoridad ejidal pidió, a pesar de ello, que el gobierno les eche la mano, no solamente a los campesinos de la zona de Los Planes, sino a todos los productores del municipio, porque con eso de la pandemia y, luego las inundaciones, la gente anda muy necesitada de apoyos.
José Antonio Pacheco Novelo dijo que el gobierno tiene que ser recíproco con los quintanarroenses que le dieron su voto cuando andaba en campaña, principalmente, ahora que la gente la está viendo difícil por la enfermedad del coronavirus, remarcó.
Por Lusio Kauil