Quintana Roo

Por protesta, familias se quedan sin recolecta de basura en Chetumal

Sólo dos camiones de recolección de basura fueron operados en una ciudad con más de 200 mil habitantes
Por protesta, familias se quedan sin recoleta de basura en Chetumal / Manuel Collí

La capital del estado prácticamente se ha quedado sin servicio de recolección de basura como consecuencia de las irregularidades administrativas y financieras del gobierno de Otoniel Segovia Martínez.

La gran mayoría de camiones recolectores no salieron a las calles como parte del paro de brazos caídos que en protesta realizan los empleados sindicalizados por la simulación del aumento del salario mínimo a la clase trabajadora.

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El gobierno municipal sólo cuenta con 16 camiones recolectores para las más de 100 colonias y fraccionamientos de la ciudad de Chetumal, donde a diario se generan alrededor de 300 toneladas de desperdicios.

En recorrido por la Dirección de Servicios Públicos Municipales se observaron estacionados la gran mayoría de las unidades recolectoras y a los trabajadores esperando que sus demandas sean atendidas.

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De acuerdo con información del gobierno municipal los únicos dos camiones que salieron a realizar la recolecta fueron destinados a los puntos de mayor generación de basura como lo son plazas, mercados y algunas empresas que generan gran cantidad de desechos, dejando a los habitantes de las colonias sin este servicio tan importante.

En recorrido por diversas calles de la ciudad se observaron los contenedores de basura repletos en las banquetas. También se observaron bolsas de desperdicios apiladas afuera de las viviendas como resultado de un gobierno municipal que prometió una transformación, pero que ha repetido los errores de administraciones pasadas, perjudicando a la ciudadanía con deficiencias en los servicios públicos, producto de malas decisiones tomadas desde el Palacio Municipal.

Como se recordará, los trabajadores sindicalizados han iniciado un paro de brazos caídos ante las anomalías cometidas por la administración municipal, que ha compactado su salario para justificar el incremento del 15 por ciento ordenado por la Comisión Nacional de Salarios Mínimos.

Y es que, el gobierno municipal simuló el incremento salarial, pero realmente les pagó lo mismo a los trabajadores, generando descontento.  Lo que realizó el gobierno que encabeza Otoniel Segovia fue aumentar el pago fiscalmente comprobable de los trabajadores, pero les recortó la diferencia de sus compensaciones para terminar pagándoles lo mismo.

Las protestas iniciaron la noche del pasado viernes en la Dirección de Servicios Públicos Municipales, pero a partir de las 9 de la mañana del lunes se extenderán a las diversas áreas del Palacio Municipal, DIF, zoológico, Obras Públicas, Protección Civil, parque ecológico, Servicios Generales y mercados.

Cabe recordar que, el líder sindical Pablo Ley Moo calificó los hechos como descuentos indebidos, gravosos y sin tomar en cuenta a los empleados. Y es que apenas hace unas semanas, decenas de trabajadores protestaron en el Palacio Municipal porque aseguran les fueron recortados sus aguinaldos, por lo que ahora con el hecho de que no les pagaran el aumento salarial ya no aguantaron la situación y decidieron protestar de manera más enérgica ante las arbitrariedades.

Hasta el momento el presidente municipal  Otoniel Segovia Martínez no les da la cara a los afectados, al tiempo que ha anunciado un plan para nivelar compensaciones, que implica que muchas personas verán descuentos en sus percepciones en las próximas semanas, aumentando el descontento con la administración que prometió una transformación y no mentir, pero constantemente salen a la luz irregularidades y perjuicios hacia la clase trabajadora.

El aumento al salario debería beneficiar alrededor de 2 mil trabajadores, que ahora se sienten defraudados y engañados por la administración, por lo que mantendrán sus protestas hasta que se otorgue una solución.

Y mientras eso sucede, el servicio de recolección de basura está prácticamente suspendido, lo que afectará a las familias de Chetumal como consecuencia de las malas decisiones del Ayuntamiento de Othón P. Blanco.