El titular del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Quintana Roo, Margarito Molina, reconoció que concluirá la presente administración estatal y la zona de Ichkabal, llamada a ser un detonante turístico de la Zona Sur de la Entidad, no será abierta al público. Consideró que al menos se requieren tres años más de estudios.
Molina Rendon confirmó que el proyecto se encuentra estancado desde el 2018, cuando se rompieron las negociaciones entre ejidatarios y la entonces secretaria de Turismo del Estado, Marisol Vanegas Pérez.
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Sin embargo, manifestó que independiemente de los problemas relacionados con la tierra, se requiere de un estudio de factibilidad en materia de investigación arqueológica por parte del INAH, que implicarían tres años de trabajo y unos 30 millones de pesos, además de que para su apertura también se haría necesario establecer servicios básicos, contratación de personal, custodios, entre otros temas.
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Cabe mencionar que, en febrero de 2020, la Secretaría de Turismo (Sedetur) de Quintana Roo se desligó de las negociaciones para la apertura del sitio arqueológico de Ichkabal, luego de diversas críticas a la extitular de Sedetur Marisol Vanegas Pérez, de ser responsable de la pérdida de recursos y de que fracasaran las negociaciones con el ejido Bacalar.
Esto luego de millones de pesos invertidos en un proyecto integral del sitio, aun cuando la restauración y apertura del sitio arqueológico es incierta, y de la que se dijo no estará lista a corto ni a mediano plazo.
Y mientras, la apertura se ve cada vez más lejana, existe un módulo de Internet gratuito que se construyó en la zona arqueológica de Ichkabal, el cual luce abandonado y deteriorado, ya que desde su edificación no ha tenido uso y tampoco ha recibido mantenimiento.
La obra costó más de un millón de pesos y se levantó en el 2017 en medio de la nada, porque el sitio arqueológico aún permanece cerrado al público.
El módulo de Wifi gratuito luce con cuarteaduras en sus sillas y demás estructuras de concreto, con la pintura gastada y varias partes se le han desprendido, producto del abandono durante tres años.
En ese mismo año se destinaron 11 millones de pesos al denominado Proyecto Integral en la Zona Arqueológica de Ichkabal, en el cual, en 2018, se invirtieron 5 millones para la construcción del camino de acceso, equipamiento e infraestructura de apoyo de la zona arqueológica, que suman en total 16 millones de pesos.
Dichos documentos permanecen guardados y sin aprovecharse, porque la construcción de la carretera sigue sin poder concretarse, a pesar de que la Federación había destinado más de 100 millones de pesos para la habilitación de la vía de acceso a las ruinas; sin embargo, los proyectos quedaron estancados luego de que la secretaria de Turismo rompió las negociaciones y canceló una serie de acuerdos con los ejidatarios de Bacalar, quienes son los propietarios de las tierras.
A raíz de esta situación, el Gobierno del Estado optó por relevar a Marisol Vanegas de esta responsabilidad y la cedieron a la Secretaría de Gobierno desde hace más de año y medio, pero desde entonces no hay resutlados.
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RM