Quintana Roo

Fermín Mundaca: Historia de un pirata enamorado en Isla Mujeres

Isla Mujeres cuenta con una rica historia desde la época de los Mayas, sin embargo en vísperas de San Valentín esta historia es la más idónea
En su tumba se lee la frase "Como eres, yo fui" y "Como soy, tú serás" / Internet

Isla Mujeres es un lugar que cuenta con una rica historia que comienza desde la época de la cultura Maya, lo que se puede confirmar con los antiguos vestigios que se encuentran en un templo-observatorio en la parte más alta de un arrecife en la punta sur de la isla.

Sin embargo, la historia de esta ocasión, comienza en 1517, cuando Francisco Hernández de Córdoba arribó a Isla Mujeres, aunque en ese tiempo no se llamaba de esta forma, pues fue él quién la nombró de esta manera, ya que dentro de su travesía, encontró varios ídolos de madera de una diosa Maya.

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Varios años después, la isla al igual que otras de la región, se vieron convertidas en un lugar al que los piratas y contrabandistas, así como tratantes de esclavos, llegaban a realizar sus actividades ilícitas.

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Dentro de todos los personajes que pasaron por aquí, uno de los más conocidos, por no decir que es el más famoso, es el pirata español Fermín Mundaca.

Él era un mercader y tratante de esclavos, pero no era lo único que representaba a este ilustre personaje, sino que también era un arquitecto, agricultor y artista, pues tenía talento como escultor, pintor y poeta. 

A principios del siglo XIX, arribó a la isla y tomó la decisión de establecerse en el lugar, por lo que se deshizo de su embarcación, además de asesinar a toda la tripulación, asegurándose de esta forma que ninguna persona pudiera dar algún indicio de dónde se encontraba refugiado.

Con lo que el reacio pirata Mundaca no contaba, es con que iba a sucumbir ante los encantos de una lugareña de nombre Martiniana Gómez Pantoja y a quien llamaban "La Trigüeña", una hermosa mujer de la que Fermín se enamoró perdidamente y pasó el resto de su vida, tratando de conseguir (u olvidar).

Fermín Mundaca, hizo todo por enamorarla, intentando ofrecerle costosos regalos y tomando cada oportunidad que se le presentaba para cortejarla, sin embargo "La Trigüeña" tampoco desaprovechaba cada ocasión para rechazar al enamorado pirata.

Como uno de sus desesperados intentos del Mundaca para que la bella isleña lo aceptara, el pirata mandó a construir una hacienda llamada Vista alegre, conocida en la actualidad como Haciendo Mundaca, lugar que se encuentra rodeado de bellos jardines con plantas exóticas. Este lugar se encuentra en la parte sur de la Isla.

Sin embargo, ninguno de estos esfuerzos fueron suficientes, ya que la chica nunca le correspondió y terminó casándose con un hombre que también vivía en la isla, por lo que Mundaca decidió irse de ahí, al ver que su amada ya estaba casada.

Se dice que huyó a Mérida y que fue ahí donde pasó sus últimos días deambulando con el corazón roto y repitiendo la frase, "Como eres, yo fui" y "Como soy, tú serás", frase que se puede leer en su tumba, que a pesar de los relatos que aseguran que fue ahí donde murió, se encuentra vacía y nadie sabe dónde están sus restos. 

Con información de Destinos México

MA