La capital del estado de Quintana Roo, guarda mucha más historia de la que muchas personas podrían imaginar, pues no solamente es un lugar donde han ocurrido hechos históricos y políticos relevantes para el estado y el país, sino que al igual que cualquier ciudad, guarda sus propias leyendas que son transmitidas entre sus habitantes y que perduran por generaciones.
Uno de los casos más conocidos es la historia del palacio municipal de Chetumal, un edificio que ya puede ser considerado bastante antiguo, pues existía desde principios del siglo XX y servía nada más y nada menos que como una cárcel.
Se dice que este recinto tiene mucha 'energía oscura', acumulada entre sus paredes a causa de su trágica historia, pues una cantidad incontable de prisioneros perdieron la vida aquí, de una manera inhumana que en ese entonces era bastante común.
En esa época, se aplicaba la 'Ley de Fugas', que consistía en otorgarle al reo unos segundos de libertad para intentar escapar del lugar, sin embargo, después de cierto tiempo los guardias disparaban a discreción. El objetivo de esto, era quitarles la vida, pero si corrían con la suerte de evitar todas las balas, se les otorgaba su libertad de manera permanente.
Evidentemente, era casi imposible escapar bajo estas condiciones, por lo que, muchos reos murieron de esta forma, siendo condenados a estar encerrados eternamente en esa cárcel, incluso después de la muerte.
Por este motivo, hay mucha gente que afirma que, hasta el día de hoy se puede sentir la presencia de todos estos espíritus deambulando por el edificio. Otros dicen que han presenciado fenómenos paranormales que ocurren de forma constante, pues visitantes y trabajadores, han escuchado murmullos, han visto objetos moviéndose solos, han sentido que una presencia los persigue por los pasillos y hay quienes incluso afirman, haber visto fantasmas.
A causa de todas estas afirmaciones, hay investigadores especializados que se han atrevido a entrar al lugar y han descubierto presencias paranormales que según cuentan, en una ocasión lograron encerrar a una de ellas bajo llave y posterior a esto desató toda clase de ruidos de ultratumba.
Finalmente, el interior es un lugar que provoca una sensación helada a pesar del calor que pueda llegar a sentirse en las afueras, sin embargo, el exterior tampoco parece ser un lugar seguro, pues todo visitante comenta que por fuera del edificio, se puede percibir a las almas que observan hacia afuera, en busca de su libertad para poder descansar en paz.
Con información de El portal del miedo
MA