Quintana Roo

Más de 75 mil estudiantes en Quintana Roo abandonan la escuela

Las clases en casa han ocasionado que estudiantes en Quintana Roo hayan desertado en el transcurso del ciclo escolar durante la pandemia
Alumnos de educación básica y preparatoria abandonaron las clases / Por Esto!

La crisis sanitaria devastó al sistema educativo en todo el país. Alumnos y padres de familia perdieron interés en seguir las clases por televisión, dejaron de hacer tareas porque no tenían los medios para enviar y recibir mensajes instantáneos por teléfono celular y en algunos casos un familiar se enfermó de COVID-19 o falleció, lo que influyó para que abandonaran sus estudios.

En Quintana Roo, 75 mil 696 alumnos de educación básica y bachillerato han desertado desde agosto de 2020, cuando inició el ciclo escolar 2020-2021, hasta marzo de 2021, debido a que se aburrieron de las clases por televisión, perdieron a un familiar por el coronavirus, no tenían conectividad a Internet, el maestro no pudo mantener contacto con sus alumnos o simplemente porque perdieron interés en llevar esta dinámica de aprendizaje.

Noticia destacada

Deserción escolar por COVID-19, dejan de estudiar más de 40 mil alumnos en Campeche

Noticia destacada

Por COVID-19, más de 95 mil alumnos dejaron las clases en Yucatán

Un análisis sobre el abandono escolar elaborado por la organización civil Mexicanos Primero, calcula que en esta entidad los niños de primaria fueron los que más desertaron, en comparación con los de secundaria y educación media superior y con relación a los años “normales”, ya que no superaba 1.5 por ciento de deserción.

Noticia destacada

Utilizan patio de escuela como corral en Tixkokob

Noticia destacada

Crean la primera escuela feminista de arte urbano en San Luis Potosí

De acuerdo con la estimación que considera lo que han respondido padres de familia y alumnos en otras encuestas, así como el abandono escolar en años anteriores en los que no había pandemia, en el lapso de estos últimos siete meses 42 mil 79 niños que cursaban la primaria terminaron por abandonarla, tanto por razones académicas, como por situaciones socioemocionales vinculadas al coronavirus.

“Los niños prácticamente se fueron desconectando de la dinámica en la que tomaban clases. El abandono por cuestiones académicas ha sido porque no le entienden, porque no les gusta, porque reprueban o se aburren, y si ya existían esas razones antes de la pandemia, después de ésta, las razones de que se aburren, de que las clases no son lo que esperaban, se han incrementado”, explicó Fernando Ruiz, director de investigación de Mexicanos Primero, una organización que lleva más de 15 años dedicada a comprender el sistema educativo en México.

En el caso de la secundaria, la estimación indica que 18 mil 757 adolescentes de Quintana Roo han abandonado sus estudios “porque si de por sí están en una edad en la que no se hallan en las aulas, con las clases a distancia con mala recepción, con lecciones por televisión que son muy malas, se ve horrible la imagen o porque falla la señal en el celular, dejan de tener comunicación con sus maestros”.

Lo mismo ocurre con los jóvenes de bachillerato. El investigador de esta organización detalló que los maestros optaron por dejarles un cúmulo exagerado de tareas porque en muchas partes no hay manera de que los alumnos se conecten virtualmente y piensan que con trabajo en casa van a aprender, pero si no tienen quién les ayude, si sus papás apenas cursaron la secundaria o están trabajando fuera del hogar, pues terminan desertando.

En este nivel académico, el cálculo indica que en este periodo del actual ciclo escolar, 14 mil 859 estudiantes de bachillerato se han ido desconectando de sus clases.

El analista de Mexicanos Primero apuntó que debido a la pandemia miles de alumnos ya no se inscribieron, pero la mayor deserción ha sido después de diciembre de 2020, cuando la segunda ola de contagios por COVID-19 ocasionó que en cientos de hogares la situación por un enfermo o un fallecido se complicara.

“Podemos ver que se presentó un fenómeno en todo el país, porque son alumnos que se inscribieron, pero que dejaron de mantener comunicación con los docentes o que el mismo contagio en los hogares ocasionó que no tuvieran el ánimo de seguir o no hubo condiciones para retomar las clases”.

Deserción mayor en enero de 2021

La situación después de las vacaciones de diciembre no mejoró en nada la situación escolar de participación y comunicación de los alumnos, porque “la segunda ola de contagios del coronavirus fue un desastre, entonces fue una cosa brutal y el abandono subió”, señaló.

A decir del experto en el sistema educativo mexicano, la crisis sanitaria que se vivió en enero propició que niños y jóvenes perdieran a familiares o incluso a sus papás, y ya no hubo condiciones para ser constante en la escuela.

“Hay hogares que han enfrentado el coronavirus y, si la familia estuvo enferma, no hubo tiempo para estar en clases, hacer tareas y se fue descuidando, al grado de que ya no siguieron, además de que en algunos prevalece el daño emocional que impide que los niños retomen clases”, subrayó Fernando.

La Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu) también diseñó una encuesta entre docentes y encontró que 50 por ciento de los maestros admitió no tener elementos para ayudar a sus alumnos a resolver su situación emocional, lo cual influye en que abandonen la escuela.

Al revisar las estadísticas de abandono escolar de años anteriores, comentó que la pandemia ocasionó que la deserción fuera cinco veces mayor al abandono típico que se ha mantenido en los cinco años anteriores a 2020, y se disparó drásticamente en primaria, porque en secundaria y bachillerato es mayor en años normales, pero ahora es muy grave a nivel de primaria.

“Los maestros que más se han desconectado de los alumnos son los de las escuelas ubicadas en zonas rurales, porque son los docentes que no viven en las comunidades, viven lejos y al momento de suspenderse las actividades, no tienen contacto con ellos y no hubo forma de ofrecerles un plan alternativo para que siguieran tomando clases”.

A lo largo de esta pandemia varias universidades y organizaciones civiles han realizado encuestas y aunque aclaran que la muestra no es representativa a nivel nacional, han advertido que la manera como han tomado las clases por televisión y dejando tarea, se ha hecho de una forma muy desarticulada, lo que ha propiciado que los niños abandonen la escuela y también está la parte socioemocional.

Por ello, el especialista concluyó que ven difícil que los niños regresen a clases y lo más probable es que la mayoría retome sus estudios cuando inicie el próximo ciclo escolar, pero tampoco hay certeza de que la mayoría lo haga.

CG