Pese a que ya terminó la temporada vacacional, la zona arqueológica de Tulum recibe buena afluencia de turistas, principalmente extranjeros, pero desafortunadamente siguen sin acatar las medidas de higiene dentro de las áreas.
En un recorrido por la zona arqueológica de Tulum se pudo apreciar cómo turistas apresuraban su paso para poder acceder a la última hora del recorrido por las ruinas, pues pese a que el horario de cierre es a las 17:00 horas el último acceso es a las 13:30 horas, por lo que no querían perderse la oportunidad de conocer este rincón cultural con el que cuenta el municipio de Tulum.
Antes del comienzo de la temporada vacacional, la Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), informaron que, de acuerdo con el Semáforo Epidemiológico en el Estado de Quintana Roo, del 28 de marzo al 10 de abril, el horario en las zonas arqueológicas de Tulum y Cobá sería de lunes a domingo, de 9:00 a 17:00 horas.
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El último acceso en Tulum será a las 15:30 horas y el aforo permitido es de cuatro mil personas por día. Las zonas que permanecieron cerradas al público fueron: El Castillo, los templos de la Serie Inicial, del Dios del Viento y del Dios Descendente, y la Casa del Cenote, así como la caleta y la playa, por lo que turistas que iban con la intención de nadar en el mar Caribe de las ruinas mayas, no pudieron hacerlo.
Ignoran medidas de higiene
Las autoridades municipales fueron claras en que se debía respetar las medidas de higiene para el acceso a esta zona, sin embargo, pese a que personal del área revisa la temperatura de los asistentes y verifica que además porten correctamente el cubrebocas, ya dentro de la zona la gran mayoría de turistas no lo usan y no hay persona que controle su cumplimiento.
Por si fuera poco ya dentro de las ruinas se pudo apreciar cubrebocas tirados, botellas de plástico en las áreas, a pesar de que el mismo recinto cuenta con botes de basura clasificados en orgánico e inorgánico.
Sin embargo, no acatan estas medidas y burlan a la autoridad, pues aunque estén acordonadas las ruinas, con tal de tener una mejor fotografía pasan hasta el área.
“La zona es muy amplia y no podemos estar en todos lados, esperan el momento para que nos vayamos del área para que puedan acceder, lo mismo pasa con el cubrebocas, ya son adultos y son conscientes de las medidas de higiene y las reglas que hay dentro de la zona arqueológica”, destacó uno de los guías quien omitió su nombre.
MA