La Comisión Federal para la Protección de Riesgos Sanitarios (Cofepris), suspendió en lo que va del año más de 50 fiestas clandestinas, principalmente en los municipios de Tulum y Playa del Carmen.
Miguel Alejandro Pino Murillo, director de Protección Contra Riesgos Sanitarios en Quintana Roo afirmó que continúan con los operativos para la detección de estas fiestas clandestinas, las cuales se realizan, en el caso de Tulum, en medio de la selva y en lugares con difícil acceso.
“Tenemos operativos de verificación sobre todo en la zona norte, como Tulum, Playa del Carmen, Muyil, Akumal. Está prohibida la realización de estos eventos masivos, existen protocolos y medidas preventivas tanto por la federación como del estado para que puedan llevarse eventos con más de 200 personas”, sostuvo.
Pino Murillo advirtió que en caso de incumplimiento y poner en riesgo la salud pública, es motivo de suspensión, aseguramiento del inmueble, licores e inmobiliario, además de una posible denuncia penal para las personas que estén realizando esta clase de eventos.
“Al día de hoy desde que iniciamos el año llevamos poco más de 50 fiestas clandestinas suspendidas, hemos asegurado equipo de sonido, alcohol, mobiliario del establecimiento, algunos si se han acercado y han pagado multas que son alrededor de 80 mil hasta 174 mil pesos para recuperar sus equipos y se les señala que en caso de reincidencia -la multa- se duplica”.
En ese sentido indicó que también han recibido quejas de los propietarios de estos lugares donde se han realizado las fiestas clandestinas, ya que tienen documentado casos donde los dueños fueron timados al prestar sus inmuebles.
“La multa es para el propietario, muchos ni siquiera conocen a quienes prestaron su finca o rancho como tal, y les dejan el procedimiento administrativo”.
Añadió que también tienen casos donde nadie se ha hecho responsable de ello, “estamos hablando de un 50 por ciento de los eventos (...) como tal hemos tenido dos casos de reincidencia en Tulum, es donde tenemos la mayor realización de lo que se conoce como Selva Party, que se hace en medio de la selva y hacemos la detección por medio de drones”.
Justificó el uso de drones debido a lo complicado para llegar a estos lugares, “muchos se encuentran en lugares dispersos, alejados, donde a simple vista no son detectables y a través de drones los localizamos”.
Añadió que la sociedad quintanarroense también se ha sumado a los operativos, en el sentido que denuncian cada vez que hay algún evento masivo, mismo que es investigado hasta corroborar los hechos e iniciar el proceso de darse el caso.
Actualmente las selva party son promocionadas a través de plataformas digitales, principalmente en Facebook, donde los anfitriones exigen un pago por adelantado para “apartar el lugar” y al momento de liquidar el saldo dan la ubicación del sitio donde pasaran a recoger a los asistentes.
Posteriormente, según los testimonios de los usuarios que han asistido a este tipo de eventos, los llevan a un lugar en medio de la selva, que más allá del difícil acceso, no cuentan con señal de telefonía celular, lo que beneficia a los organizadores de estos eventos para que los visitantes no revelen la ubicaciones a través de videos o comentarios en redes sociales.
MA