A la Opinión Pública:
La Dirección General de los Diarios Por Esto! responsabiliza de manera directa al Gobernador del Estado de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, del intento de frenar la publicación de investigaciones que se hacen de manera profesional en este medio, en donde se han revelado las irregularidades en las que incurre su gestión en todos los rubros de la administración pública que aquí encabeza.
En los últimos meses, bajo una mano firme guiando el esfuerzo editorial de Por Esto! Quintana Roo, con información verificada y en estricto apego a la ética periodística, se ha señalado el deterioro de la entidad durante el actual periodo gubernamental.
Las cifras de la inseguridad, el mal manejo de la pandemia, los contagios, los fallecidos víctimas del COVID-19, el endeudamiento público y el desacato a las medidas establecidas por la Federación para salvaguardar la vida de los quintanarroenses, nadie los inventa.
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Son datos de autoridades e instancias encargadas, por ley, de supervisar la función pública y Carlos Joaquín González no la está cumpliendo a cabalidad. Lo dicen el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), el Sistema de Administración Tributaria y la Secretaría de Salud Federal, entre otras autoridades.
Las acciones, no benéficas para el pueblo, mandadas por autoritarismo no pueden ser aplaudidas; menos cuando el mismo pueblo está muriendo. En sus manos tiene el principal destino turístico del país y lo está triturando con el mal ejercicio de sus funciones, lo mismo hace con la Zona Maya; si señalarlo a través de fuentes confiables le parece “mala intención”, lo aceptamos, porque actuar así sólo a usted le representa agravio, no así a los quintanarroenses que diariamente nos distinguen con su preferencia y recorren por nuestras páginas el desalentador panorama.
En los Diarios Por Esto! estamos abiertos también a la demanda y a la crítica, somos defensores de la libertad de expresión, que quede claro, por eso el día de ayer se atendió una petición laboral de algunos compañeros en las instalaciones de Cancún; sin embargo, la infiltración, alentando la parálisis del área de circulación, fue evidente.
Utilizaron a gente de trabajo para evitar que la verdad llegara hasta nuestros lectores, No lo lograron ni lo conseguirán, porque esas prácticas tienen caducidad y el gobernante sólo tiene para pagar unas cuantas dignidades… con nosotros está la identidad y soberanía. Señores, seguiremos haciendo lo que mejor sabemos hacer: Periodismo, le incomode a quien le incomode. Esto no se trata de una voluntad, se trata de unidad, democracia y libre expresión.