El dinero que ingresa a la entidad desde el extranjero, particularmente el de personas que emigraron en busca de mejores oportunidades, se incrementó 65 por ciento este 2021, en comparación con el primer semestre de 2020, el llamado “año perdido” por las afectaciones económicas que dejó la contingencia sanitaria por el COVID-19.
De esta manera, las remesas pasaron de 87.5 millones de dólares que llegaron durante los primeros seis meses de 2020 a 144.8 que se acumularon de enero a junio de este año, según el informe que publicó este lunes el Banco de México (Banxico).
El reporte destaca también un ascenso en el escenario nacional de remesas de 22.4 por ciento anual, el más alto de la que se tenga registro desde 2006.
De acuerdo con el especialista en movimientos migratorios, Horacio García, si bien Quintana Roo no es una entidad que exporte una cantidad significativa de migrantes –al contrario, 56 por ciento de su población proviene de otro país o estado— el hecho de que las remesas repunten puede ser un indicador de que más personas salieron en busca de oportunidades.
“Más que un indicador positivo, el aumento de las remesas puede implicar también un aumento de migrantes, de gente que ya no tuvo oportunidad para su desarrollo y el de su familia en el lugar donde vive, por lo que se vio orillada a buscarle por otro lado”, consideró en entrevista.
El experto observó, no obstante, que este dinero extranjero que ingresa al flujo local es un refuerzo que oxigena la adolorida economía de las familias.
“Es, desde luego, oxígeno para las finanzas de los hogares. Esto significa que habrá recursos para inyectar en la economía local, en las pequeñas tiendas de abarrotes, mercados, tianguis, que también han sido duramente afectados por las restricciones que trajo la pandemia”, apuntó.
La cantidad de dólares que llegó a Quintana Roo cada mes ha mostrado una recuperación sostenida desde abril de 2020, cuando ingresaron 43 millones, la cifra se disparó a 88.1 millones en julio, luego cayó a 63 millones de dólares en octubre, para escalar a los casi 80 millones de abril de 2021.
De acuerdo con información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la Zona Sur del Estado es la que más municipios expulsores de personas al extranjero tiene: Othón P. Blanco, que alberga a la capital, Chetumal; José María Morelos y Felipe Carrillo Puerto, dos de las localidades con mayor rezago económico de acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
En la Zona Norte, el fenómeno se da más en los municipios de Benito Juárez, donde está Cancún, y la isla de Cozumel, cuya mayor actividad económica recae en los servicios turísticos.
García Valencia apuntó que la brecha económica que existe entre el Norte y el Sur de Quintana Roo “hace evidente la desigualdad en el desarrollo regional, por lo que es lógico que sean los municipios más pobres los que expulsen a sus familias”, ya que, además, “vivir del campo se ha convertido en un deporte extremo, por las sequías, los huracanes y la falta de apoyos agrícolas”.
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Los principales lugares de residencia de los quintanarroenses establecidos en Estados Unidos son California, Texas, Alabama, Carolina del Norte y Florida.
Quintana Roo es la segunda entidad con el menor número de viviendas con emigrantes a Estados Unidos.
JG