Las lluvias que iniciaron por la mañana y se prolongaron hasta la tarde, afectaron las actividades turísticas en Holbox, principalmente a lancheros y prestadores de servicios ubicados en la zona de playa.
El optimismo que tenían de alcanzar un repunte en este fin de semana se redujo debido a las precipitaciones.
Aunque no fueron aguaceros, de inmediato las calles quedaron en malas condiciones debido al paso constante de los carritos de golf y pesadas unidades que llegan para abastecer tiendas de abarrotes.
Las actividades en la playa fueron mínimas, además de que los negros nubarrones durante la tarde amenazaban con provocar aguaceros por la noche, debido al sistema climático que afecta la región peninsular.
Aunque muy temprano se registró una considerable entrada de turistas extranjeros y nacionales, sólo estuvieron un rato en las playas, pues a medio día buscaron barcos para salir del destino y retornar a sus lugares de origen.
Cerca de las 2 de la tarde cayó un torrencial aguacero que afectó Holbox y el puerto de Chiquilá.
Como consecuencia, las calles de arena quedaran bajo el agua, lo que complicó el tránsito de los visitantes hacia hoteles y restaurantes.
Los prestadores de servicios dijeron que, si bien no alcanzaron el anhelado 70 por ciento de ocupación que calculaban, por lo menos llegaron a 50 por ciento, lo cual fue bueno a pesar de las lluvias.
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JCL