El caso de la colombiana Lina Cruz, mujer secuestrada por su 'novio' en Playa del Carmen; no es el primero dentro del historial criminal de Jason Monroe, un abusador sexual y golpeador atraído por el sadomasoquismo.
El 6 de mayo de 2019, Monroe fue capturado por la Policía de Scottdale, Arizona, tras haber sido denunciado por una mujer que estaba secuestrada en el sótano de su casa, en la calle 94 con Thunderbird Road. La víctima relató en la Corte que conoció a Monroe a través de una app de citas y se juntaron varias veces, en las cuales él le contó que le gustaba el sadomasoquismo, lo cual a ella no le pareció malo, en ese momento, pues pensaba que todo era parecido como las películas de 50 Sombras de Grey.
Tras convencerla de irse a vivir con él y que viviría algo sorprendente a lado de él, ella se fue a vivir con el secuestrador y fue cuando se topó con la triste realidad. Después de apoderarse de su dinero y dejarla vulnerable, Monroe le pidió que firmara un documento como el de la película en el que autorizaba ser su "esclava sexual". Ella se resistió, pero él la amenazó con echarla a la calle sin nada y firmó, aunque realmente el documento no tuvo al fin ninguna validez real.
Desde ese momento, las cosas fueron de mal a peor para la joven, Monroe le ponía collares eléctricos y la encerraba dentro de una jaula en el sótano parecido a la habitación del protagonista de 50 Sombras de Grey, con varios objetos sexuales y de tortura, según describió la víctima.
Durante dos meses estuvo encerrada en ese lugar, donde con frecuencia Monroe la abusaba, golpeaba y torturaba, afortunadamente el tormento que vivía terminó gracias a una denuncia ciudadana.
Tras dar con el paradero del criminal, la policía logró liberar a la mujer y brindarle atención médica y psicológica. Así mismo, capturaron a Monroe y lo llevaron a juicio, Incluso, la Corte pudo comprobar que la mujer sufrió varias fracturas por los golpes y también fue electrocutada en múltiples ocasiones.
En las audiencias, varios vecinos testificaron contra Monroe, señalando que escuchaban los gritos de su víctima. También, se presentó un audio de la víctima cuando era torturada por Monroe y los fiscales del caso demostraron que él había tenido un antecedente de abuso, tortura y secuestro a finales de los años 90.
Jason Monroe Smith fue acusado de secuestro y agresión agravada en la que una víctima está atada o restringida. Sin embargo, no fue encarcelada como se esperaba, pagó una fianza de 250 mil dólares, y desapareció de los Estados Unidos y se fue a México, pese a que por haber quedado libre bajo fianza, se le ordenó usar un monitor de tobillo.
Lamentablemente, en septiembre de 2020, Jason Monroe Smith conoció a la colombiana Lina Cruz, residente en México, mediante una App de citas, sin imaginar lo que le sucedería.
Desde enero de 2021 hasta la fecha se desconoce el paradero de Lina Cruz, por lo que sus familiares buscan apoyo de las autoridades mexicanas para lograr dar con el paradero de Monroe, quien tendría secuestrada a Lina desde hace más de un año.
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jcl