La suspensión de actividades tanto de bancos de sangre, clínicas y farmacias no para en Quintana Roo, pues la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) dio a conocer que ya son 26 establecimientos relacionados con la salud suspendidos en la Entidad por sus malas operaciones.
Pues además de las 23 farmacias y/o puntos de venta que tuvieron que parar sus actividades debido a la venta irregular de medicamentos controlados el pasado mes de agosto, dos clínicas y un banco de sangre también fueron suspendidos por la dependencia de manera definitiva; inclusive ya desaparecieron los locales.
La suspensión se dio hacia el Banco de Sangre Hematología Integral Cancún, ubicado en la avenida Tulum a la altura de la Supermanzana 12, el cual tuvo una clausura total y definitiva del establecimiento por no cumplir las medidas marcadas por la Cofepris.
La segunda suspensión fue a Dental Clinic Propiedad de Corporación Dental Joba S.C., en la Zona Hotelera, mientras que la tercera fue a Clínica Perfection Plastic Surgery Center ubicada en avenida Holbox.
La Comisión reveló que estos establecimientos estaban operando sin ninguna ley, por lo que luego de varios operativos fueron ubicados, por lo que la dependencia hizo un llamado a poner especial atención cuando se hagan ciertos procedimientos quirúrgicos y verificar que cuenten con todos los permisos, pues de lo contrario estarían poniendo en riesgo su vida.
La mayoría de suspensiones se han dado en Cancún, Playa del Carmen y Tulum, mientras que los establecimientos por lo regular se encontraban en zonas turísticas o céntricas de dichas ciudades, en donde inclusive se atendían a extranjeros de todas las nacionalidades.
Entre las irregularidades se encuentra la falta de licencia sanitaria, medicamentos controlados sin acreditación de la tenencia legítima, falta de documentación legal de proveedores, libros de control sin firma del responsable sanitario, recetas médicas sin datos del paciente, entre otros.
Las autoridades identificaron que algunos establecimientos vendían el medicamento irregular y sin receta únicamente a personas extranjeras. De igual manera se hallaron tarjetas publicitarias que informaban sobre la localización de farmacias o números telefónicos para solicitar medicina a domicilio.
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HS