Uno de los problemas que han afectado a residentes y visitantes de Cancún durante muchos años es el monopolio de los taxis, que han desarrollado la costumbre de ofrecer servicios según su conveniencia, con tarifas impuestas por los propios conductores. Además, un considerable porcentaje de las unidades presenta un estado desfavorable, ya que su sindicato históricamente ha hecho poco para mejorar el servicio, a pesar de las advertencias emitidas por el Instituto de Movilidad de Quintana Roo (Imoveqroo) de retirar de circulación las unidades en mal estado a partir de enero.
Cuando se menciona a los taxistas de Cancún, rara vez se escuchan historias positivas. Más bien predominan los relatos de abusos, mal servicio y la clásica negativa a llevar a cabo ciertos trayectos. Estas situaciones contribuyen a empeorar la ya de por sí mala reputación que tienen, ya que los usuarios generalizan el servicio, aunque en realidad existen muchos taxistas que se esfuerzan por respetar su profesión y brindar un servicio de calidad a un precio justo. Sin embargo, lamentablemente, son la minoría.
Durante varios años, los líderes del Sindicato “Andrés Quintana Roo” prometieron retirar autos antiguos y en mal estado, pero nunca cumplieron. Ahora, el Director del Imoveqroo, Rodrigo Alcázar, asegura que ya han retirado más de 40 o 50 unidades, que no sólo no deberían estar prestando servicio, sino que deberían estar fuera de circulación, pero lamentablemente continúan operando por la ciudad en condiciones precarias.
Se informó que a partir de enero, el Imoveqroo llevará a cabo operativos para detectar y retirar las unidades en mal estado o de modelos anteriores al año 2000. Alrededor del 40 por ciento de estos vehículos deberían ser retirados de las calles por esta razón.
“Hay aproximadamente 3 mil unidades con más de 10 años de antigüedad, y ese padrón ya no debería existir. Eso representa aproximadamente un 40 por ciento de los taxis que circulan en Cancún. La idea es, de manera gradual, incentivar la mejora de las unidades. Sin embargo, los vehículos anteriores al año 2000 ya no podrán ser refrendados y dejarán de circular como taxis, lo mismo ocurrirá con aquellos en mal estado, y esto se implementará en 2024”.
Es relevante señalar que los sindicatos de todos los municipios han solicitado un aumento en sus tarifas, pero sólo el de Othón P. Blanco ha cumplido con el estudio requerido. No obstante, el informe se entregó recientemente y no hubo tiempo para su revisión. Por lo tanto, ningún sindicato tiene autorización para aumentar las tarifas, al menos en lo que queda del año. Se insta a la población a denunciar cualquier abuso durante estas fechas en las que los conductores tienden a aumentar los precios.
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HS