Las mujeres aún siguen temiendo por su seguridad en todo momento, toda vez que no hay algo tangible que haya hecho la autoridad para garantizar su seguridad, ya sea en la vida particular, social o laboral, por lo que todos los días tienen que librar serias batallas tan sólo por salir a la calle, iniciando por el acoso de los hombres, en el trabajo y en el propio hogar, aseguró Yunitzilim Rodríguez Pedraza, presidenta del grupo “Marea Verde”.
Explicó que en lo que va del año 2023, el Estado de Quintana Roo se posiciona como la Entidad con el mayor número de casos de violencia contra mujeres a nivel nacional, superando a Entidades como Nuevo León, Chihuahua, Guerrero o Veracruz, según el análisis de datos de una docena de organismos públicos y documentos oficiales.
“Si se habla de una lucha frontal contra la violencia que se ejerce hacia las mujeres, debería fortalecerse el presupuesto asignado a la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas del Estado de Quintana Roo, ya que no puede ser que los asesores de víctimas, quienes dan acompañamiento a las mujeres en asuntos del orden penal, tengan más de 600 carpetas de investigación cada uno y además, tengan un salario que no corresponda al gran trabajo que desempeñan, se requiere aumento del número de asesoras y asesores y además es urgente que reciban una remuneración justa por su trabajo”, aseguró.
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Benito Juárez es el municipio más afectado. Específicamente la ciudad de Cancún ha registrado la mayor cantidad de reportes de delitos cometidos contra mujeres, especialmente en los asentamientos irregulares, lo cual resulta alarmante porque no existen programas específicos destinados a abordar este creciente problema que revela el cruce de datos, mientras tanto las mujeres siguen en indefensión.
La activista indicó que de acuerdo con datos que tienen de violencia contra las mujeres, de enero a septiembre se contabilizaron 36 mil 582 casos de mujeres violentadas en Quintana Roo. Explicó que estos casos incluyen denuncias interpuestas o servicios solicitados a alguno de los 11 organismos públicos estatales y municipales encargados de atender a mujeres violentadas, esto abarca tanto a aquellas que sufren violencia por primera vez, como a las víctimas de reincidencia, es decir, mujeres que han experimentado violencia en dos ocasiones o más durante el periodo de referencia.
La tasa de violencia arroja una cifra preocupante: de casi 3 mil 971 casos por cada 100,000 habitantes, lo que representa cuatro veces la tasa registrada por el Estado de Nuevo León, la segunda Entidad con peores índices para las mujeres en este año.
Ante este panorama alarmante, se espera que las autoridades correspondientes tomen medidas urgentes para abordar la situación y establecer programas efectivos que atiendan las necesidades específicas de las mujeres afectadas. Por su parte, la sociedad y las organizaciones civiles también juegan un papel crucial en la sensibilización y prevención de la violencia de género.
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HS