El sector restaurantero de Cancúnvive una crisis, al no tener la demanda que se esperaba para este 2023; aunado a la inflación que ha elevado el costo de los productos, por lo que ocho establecimientos se han visto obligados a bajar sus cortinas.
Julio Villarreal, Presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) Cancún, detalló que durante este primer trimestre, ocho establecimientos no pudieron continuar operando.
“Este primer trimestre ha sido muy irregular, tuvimos altas y bajas. Los restaurantes no han tenido los clientes que se esperaban; inclusive en puentes largos, y claro que todo eso afecta. Aunque tenemos una inflación del ocho por ciento, en realidad estamos en una del 15 al 18 por ciento en los productos de primer consumo”, contó.
El líder restaurantero detalló que pese a los apoyos que se les da a los agremiados, los que recién empiezan tienen la situación más complicada, ya que se deben hacer muchos trámites para trabajar bajo una regulación y no ser clausurados o suspendidos.
“Hay muchos requisitos que se tienen que cumplir y al ser primerizos es difícil; además que los productos cada vez son más caros, hablando de carne, huevo, pollo y leche; todo ha mermado la economía de los ciudadanos, quienes restringen su economía y prefieren no asistir a restaurantes”, explicó.
Villarreal comentó que los restaurantes que bajaron sus cortinas se ubicaban en la avenida Huayacán, Zona Hotelera y dentro de plazas comerciales, que es donde más se ha resentido la disminución de clientes y donde las rentas suelen ser más caras.
“Ojalá ahora con Semana Santa haya un repunte en la demanda de los productos; que haya más clientes”, comentó.
También recalcó que para el Día de la Madre hay buenas perspectivas en cuanto a la demanda en los restaurantes, pero será cuestión de esperar para saber si ya hay una recuperación en el sector.
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NR