Cancún es el principal destino turístico de México y si se quiere disfrutar de algo más que sus hermosas playas, entonces se puede visitar alguno de los tres cenotes más conocidos de este paraíso caribeño.
Cenote es el nombre que se le dio a los pozos o estanques naturales de agua dulce abastecidos por un río subterráneo y proviene de la palabra maya "dzonot" que significa "abismo".
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Para la cultura maya eran considerados fuentes de vida, además de que creían que eran una entrada hacia otro mundo y una conexión directa con los dioses.
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¿Cuáles son los cenotes más conocidos de Cancún?
Cancún además de tener playas con arena blanca y fina, además de un mar azul turquesa; también cuenta con cenotes abiertos, semiabiertos y subterráneos, siendo estos son los tres más conocidos de Cancún:
Kin Ha es un cuerpo de agua que se encuentra ubicado en una cueva subterránea, en el kilómetro 19 de la ruta de los cenotes, la cual está localizada a unos 30 minutos del sur de Cancún. Cuenta con una plataforma en la parte de arriba desde donde se puede brincar o bien se puede descender por las escaleras de madera.
El segundo más conocido es "La Noria" un cenote muy famoso por su agua cristalina y las estalactitas. Cabe mencionar que este lugar cuenta con estacionamiento y baños, un restaurante, renta de bicicletas de montaña y paseos en tirolesa. Además de que está formado por dos cenotes independientes, y está ubicado al sur de Cancún.
Por último, ubicado al Norte de Cancún, se encuentra el Cenote Siete Bocas, el cual es en un sistema de cuevas ubicado en la Ruta de los Cenotes; además de que este sistema de cuevas es señalado por parecer un laberinto ubicado entre los túneles, con acantilados para saltar y muchas formaciones rocosas, estalactitas y estalagmitas.
Cabe señalar que se le nombró así como una referencia a las siete entradas diferentes por donde el río subterráneo alimenta a este estanque natural. Por otro lado, es necesario mencionar que se puede subir a una torre de vigilancia para disfrutar la vista panorámica a la selva, caminar por los pasillos tranquilos y oscuros que conectan los cenotes.
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NR