Los basureros clandestinos pululan en las zonas irregulares de Cancún, como el localizado en la laguna Kusamil, que incluso tiene desechos orgánicos, debido a que cerca del fraccionamiento del mismo nombre, y a pocos metros de una escuela, decenas de bolsas de basura atraen a fauna nociva y contaminan el ambiente.
Por la avenida López Portillo, a pocos metros del fraccionamiento Paseos Kusamil, se encuentra una entrada con un camino de terracería que conduce hasta las sascaberas y luego a la laguna, que ya fue bautizada de manera no oficial con el mismo nombre de los edificios que se construyeron ahí cerca.
No hay casas alrededor de este camino, y sólo se ven de repente jóvenes en moto que acuden a hacer travesuras en el cuerpo de agua, y que son reconvenidos por los trabajadores del banco de materiales, que extraen sascab y otros productos para construir más fraccionamientos en esta zona de Cancún.
Casi a la entrada de este camino hay una escuela particular, y a unos 100 metros se encuentra el nuevo basurero clandestino, que al estar en medio de una zona de selva atrae a animales que escarban entre las bolsas para llevarse algo de alimento y desperdigan los restos de desechos por todo el lugar.
Asimismo, hay decenas de bolsas de color verde, como las usadas en los hospitales para los desechos médicos, que contienen algún tipo de material orgánico, qué pájaros, ratas y perros ferales devoran poco a poco, sin saber a ciencia cierta de qué se trata.
El olor es fuerte y penetrante y ya se empieza a formar un pequeño cerro de estas bolsas, lo que hace pensar que alguna clínica cercana utiliza el lugar como basurero. Además hay llantas viejas y botellas de plástico, así como recipientes de aceite y otros combustibles.
“No sabemos quién tira esa basura, porque seguro lo hacen por las noches, acá no hay luz y cuando anochece es una boca de lobo, pero ya se está convirtiendo en un problema de contaminación, porque a veces con el sol lo que hay ahí se pudre y el olor llega muy fuerte acá a la escuela, y ya hemos tenido quejas de los niños”, apuntó uno de los trabajadores del centro escolar, quien no se identificó.
Cerca de esta zona también se encuentra una de las colonias irregulares más grandes de Cancún, cuyos habitantes también se han manifestado contra la polución, y es que sobre todo en los fines de semana, ya se ha vuelto una tradición acudir de manera recreativa a la laguna para pasar un buen rato en familia y no quieren que se contamine este cuerpo de agua que se formó de manera accidental hace algunos años.
Síguenos en Google News y recibe la mejor información
NR