Por cuarto mes consecutivo, el municipio de Benito Juárez se encuentra por encima del 70% en la percepción social de inseguridad pública por área urbana. De acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) de septiembre de 2024, esta situación se refleja en la opinión de algunos habitantes, quienes afirman que los actos delictivos están fuera de control.
Claudia Romero, ama de casa, mencionó que la inseguridad es cada vez peor, ya que antes se podía caminar a altas horas de la noche sin temor a la delincuencia, pero ahora, incluso de día, es casi imposible hacerlo sin miedo a ser víctima. “La Policía solo está de adorno, porque no se nota un esfuerzo para que este problema disminuya; al contrario, cada vez hay más casos y con mayor violencia. A un vecino lo golpearon porque no llevaba suficiente dinero para robarlo”.
Romero comentó que la falta de seguridad en la ciudad es un tema preocupante, ya que incluso en las zonas que parecían más protegidas, la delincuencia está presente.
“He sido víctima de robo en las calles y tengo amigos que fueron extorsionados en sus negocios, por lo que tuvieron que cerrar y mudarse por temor. No se vale. Aunque estos casos los denunciaron, se dice que los policías están coludidos con la delincuencia, por eso no se toman medidas”, afirmó Juan Alberto Sánchez, habitante de Cancún.
Por su parte, Angélica Pérez, otra ama de casa, expresó su preocupación por la seguridad de sus hijos, ya que ha escuchado sobre niños desaparecidos y secuestros, lo que le impide sentirse tranquila cuando los deja solos o caminan por las calles.
“Las autoridades deberían ser más eficientes, ya que solo se dedican a buscar a quién sacarle dinero. Tienen que tomar medidas más efectivas para proteger a los ciudadanos, pues la situación es alarmante y no se puede vivir con miedo”, manifestó.
El turista Gonzalo Fernández comentó que le sorprendió la cantidad de policías en las playas. “Hablé con un vendedor de frutas y me contó que ha habido riñas con armas en la Zona Hotelera, lo cual me pareció extraño, porque hace 10 años visité Cancún por primera vez y todo era muy seguro. Espero que no se convierta en otro Acapulco, porque sería una lástima”.
Chetumal, con niveles desaprobatorios
En su más reciente informe trimestral sobre los niveles de percepción de inseguridad pública en Chetumal, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que la capital del estado presentó una tendencia a la baja; sin embargo, aún mantiene niveles desaprobatorios.
Después de un trimestre (abril a junio) con altos niveles de percepción, que alcanzaron el 73.3%, el Inegi indicó que en el reporte de septiembre los números descendieron al 62.6%.
Sin embargo, estas cifras, aunque positivas, superan el registro del mismo trimestre en 2023. En septiembre de ese año, la percepción de inseguridad ciudadana fue del 57.5%.
“Me parece que se mantiene cierto nivel de seguridad. Hay zonas de mayor riesgo; tal vez sea un prejuicio, pero siento que, en las colonias más alejadas del Centro, el índice delictivo es más elevado”, comentó una ciudadana.
Aunque algunos habitantes de Chetumal dijeron sentirse tranquilos en sus colonias, indicaron que esto podría deberse a que el vecindario lleva tiempo habitado y la mayoría se conoce, por lo que, si hay alguien ajeno a la zona, se avisan de inmediato.
Otros mencionaron que han sido víctimas de robo o que intentaron forzar las cerraduras de sus viviendas para atracarlas. También criticaron que durante las últimas administraciones municipales y estatales aumentaron los delitos de alto impacto, como ejecuciones o desapariciones, tanto en los alrededores como dentro de la ciudad.
He notado más patrullas recorriendo la ciudad, pero, aun así, hay muchísimas personas desaparecidas, cuyos familiares siguen buscándolas sin recibir respuestas por parte de los oficiales”, comentó otra persona.
Entre las peticiones de los ciudadanos están un mayor patrullaje en las calles, especialmente en las zonas más peligrosas; el incremento de cámaras de videovigilancia; mejor capacidad y tiempo de respuesta a los reportes; así como mayor cercanía de la Policía con la ciudadanía.