“Olvídese de lo que cuesta el pasaje; el problema es que las rutas no están bien planeadas, dan muchas vueltas para llegar a su destino y los camiones, salvo los que van a la Zona Hotelera, ya casi no hay modernos, la mayor parte son unidades viejas. Se les olvidó o no les importó que en la ciudad la mayoría de la gente usamos el transporte ( urbano público )”, cuenta Jorge Camargo uno de los 934 mil habitantes de Cancún que vive en carne propia las problemáticas de esta ciudad.
Desde su surgimiento en 1971, Cancún se ha consolidado como uno de los destinos turísticos más importantes del mundo, atrayendo anualmente a 32.7 millones de visitantes. Sin embargo, detrás de su esplendor natural y vibrante vida turística persiste un problema histórico que afecta a casi un millón de habitantes, según el último censo, así como a miles de visitantes que se movilizan diariamente en un sistema de transporte obsoleto y mal gestionado.
La relación política y empresarial entre las compañías Turicun y Autocar ha dado lugar a un oligopolio que impide la modernización del servicio, según Rafael Lara, uno de los fundadores de la ciudad.
Los usuarios que padecen las deficiencias del transporte coinciden en que este es obsoleto e ineficaz, con paraderos saturados, como los ubicados en La Rehoyada, el Mercado 23 y Plaza Las Américas, además de la falta de planeación y el mal estado de las unidades.
En contraste, ciudades como Guadalajara, con “Mi Macro Periférico”; Pachuca, con el “Tuzobús”; y Mérida, con el “Va y Ven”, han implementado sistemas de transporte eficientes y adaptados a sus necesidades, incluyendo adecuaciones viales y protección del medio ambiente, a pesar de no tener la vocación turística de Cancún.
Nicolás Rosales, presidente de la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM), señaló que la falta de voluntad y los intereses particulares han frenado el progreso en Cancún, afectando tanto a residentes como a turistas. Enfatizó la necesidad de una colaboración efectiva entre las autoridades y los permisionarios para modernizar el transporte público, resaltando que ambos deben asumir responsabilidades.
Rosales también criticó la calidad del servicio en Benito Juárez, mencionando unidades en mal estado y altos niveles de contaminación. Propuso que el gobierno retome el control del sistema de transporte y establezca tarifas técnicas que reflejen el costo real de operación, lo que es crucial para la modernización de la flota.
Consideró que todos los niveles de gobierno deben participar en la planeación del transporte, sugiriendo que los operadores sean parte del proceso, aunque la autoridad tiene que mantener el control y la regulación.
El origen
El 10 de agosto de 1971, cuando el presidente de México, Luis Echeverría Álvarez, decretó el fundo legal de Cancún a través del Departamento Agrario, entregó al fideicomiso del Fondo de Promoción de Infraestructura Turística (Infratur), antecesor del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), 5 mil hectáreas de terrenos federales para desarrollar el proyecto que hoy es el principal destino turístico del país.
El día 29 del mismo mes y año, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) otorgó a Infratur un crédito por 21.5 millones de dólares para trabajos de infraestructura, iniciando así las primeras obras en Cancún y surgiendo la necesidad de servicios, como el transporte público.
El expresidente municipal de Benito Juárez y uno de los fundadores de la ciudad, Rafael Lara Lara, recordó que fue en ese entonces cuando, enviado por Infratur, Alfonso Alarcón Morali, encargado de Desarrollo de la Comunidad, planteó opciones para resolver los requerimientos de una ciudad naciente. En cuanto al transporte público, se inició con dos unidades de la recién creada empresa Turicun, fundada por volqueteros de Yucatán y Chetumal.
En 1971, Cancún contaba con alrededor de 150 habitantes; para 1975, año en el que Alarcón Morali se convirtió en el primer presidente municipal de Benito Juárez, cuando se constituyó como municipio, y Jesús Martínez Ross, como el primer gobernador del recién convertido estado de Quintana Roo, ya eran 25 mil.
A la par de la creación de la empresa de camiones urbanos, surgió una agrupación de taxistas que hoy se conoce como el Sindicato “Andrés Quintana Roo”, el más grande del estado, con más de 9 mil socios y 20 mil operadores.
Si bien, Lara Lara no tenía el dato de quiénes fueron los fundadores de estos sistemas de transporte, recordó que les decían “la familia Castillo”.
Centro Integralmente Planeado
La primera construcción que se realizó en el naciente Cancún, como Centro Integralmente Planeado (CIP), fue el campamento de trabajadores, en la Supermanzana 5, donde hoy se ubican el Palacio Municipal y un banco, entre las avenidas Tulum y Nader. Esto fue recordado por Lara Lara, quien también fue el primer representante de Infratur y expresidente de la asociación civil “Pioneros de Cancún”.
El 20 de abril de 1970 arribó la maquinaria pesada para iniciar la construcción de Cancún; fecha que se aprobó para los festejos de la fundación de este centro turístico. Pero antes, se edificó el campamento para ingenieros, arquitectos, topógrafos, técnicos y demás trabajadores. Con ello surgió la necesidad de contar con transporte para los cientos de personas que comenzaron a llegar.
Primer presidente municipal
La ciudad tuvo su primer gobierno a partir del 10 de abril de 1975, encabezado por Alfonso Alarcón Morali, pero carecía de oficinas, ya que el Palacio Municipal no se había empezado a construir. Así, las instalaciones del hotel El Parador fungieron durante ocho meses como sede alterna.
Los trabajos del boulevard costero iniciaron de lleno a principios de 1972. En ese momento se realizaron las primeras acciones topográficas a cargo del ingeniero Sigfrido Neumayer, quien también supervisaba a las empresas contratadas.
Canal Nichupté
A mediados de ese año, el ingeniero José García de la Torre construyó el puente definitivo del Canal Nichupté, una estructura de concreto. En ese mismo tiempo, la compañía Protexa fue contratada para ensanchar la angostísima isla de Cancún.
El 23 de junio de 1972, Infratur vendió su primer lote, en el kilómetro 6 del boulevard costero, sitio donde se construiría el hotel Maya Caribe.
Fue en ese entonces que se visualiza la primera ruta de transporte público hacia lo que era la incipiente Zona Hotelera, que pocos años más tarde sería bautizada como “Kukulcán”.
Construcción de hoteles
Hacia 1974, se inició la construcción de los primeros tres hoteles en la zona de playas y se inauguró Playa Blanca (hoy Temptation), aunque su apertura fue provisional, como casi todo lo que se hacía en esos momentos, pues la Zona Hotelera, al igual que gran parte de la ciudad, no contaba con energía eléctrica y se trabajaba con una planta que abastecía a los pocos habitantes.
En 1974, el boulevard costero ya tenía delineados los carriles actuales, pero sólo funcionaba uno. En ese mismo año se inauguró la primera playa pública: Chac Mool.
En 1980, el entonces secretario de Turismo, Guillermo Rosell de la Lama, inauguró la Fuente de Kukulcán, un vaciado de fibra de vidrio con la imagen de varias serpientes de la cultura maya. A partir de entonces, según el exalcalde de Cancún, Felipe Amaro Santana (QEPD), al boulevard costero se le comenzó a llamar Boulevard Kukulcán, cuya obra final se realizó por etapas.
Población
Los primeros habitantes en la zona eran pescadores que vivían en Puerto Juárez, recordó el expresidente municipal Rafael Lara Lara. A la par, inició la construcción de tres galeras para alojar a los trabajadores que comenzaron a llegar al destino. Las estructuras se ubicaban donde hoy está el Palacio Municipal, y con ello, se perfiló la avenida Tulum. Posteriormente, surgieron los primeros kilómetros del boulevard Kukulcán y paulatinamente más avenidas. Para esas obras llegaron volqueteros de Chetumal y Valladolid.
Lara Lara mencionó que la primera ruta de transporte urbano empezó en 1973 con la empresa Turicun. Varios años después, a principios de los 90, bajo la presidencia municipal de Mario Villanueva Madrid y el gobierno de Miguel Borge Martín, llegó Autocar. Ambas se disputan el pasaje de más del 70 por ciento de los casi un millón de habitantes que tiene actualmente la ciudad y que requieren movilizarse en estos camiones o en combis.
La “cereza del pastel”
En un principio, el ingeniero Lara Lara dijo que Turicun era dueño de todo “el pastel”, como única empresa de transporte público. Al entrar Autocar, dejaron en claro que “la cereza” era operar las rutas hacia la Zona Hotelera. Para entonces, Cancún ya había rebasado los 160 mil habitantes y comenzaba el repunte internacional del destino.
A fin de contar con cierto control que garantizara el servicio a los ciudadanos y a los turistas, así como evitar los constantes incrementos en las tarifas, surgieron las concesiones otorgadas por el municipio.
De acuerdo con el Plan Municipal de Desarrollo Urbano 2018-2030, la forma en que prestan el servicio los permisionarios genera muchos conflictos que afectan a la población, pues la oferta es muy pobre. Además, existe una injerencia del TTE (empresa de servicio de combi), que, bajo el amparo de concesiones para traslados en zonas estatales, invaden abiertamente rutas que son atribución estrictamente municipal, provocando una anarquía y desorden que resulta en un servicio que no responde a un interés público, sino a variados y conflictivos intereses privados de los operadores que lo ofrecen.
Amague
A más de 50 años de su operación en el destino, las concesionarias del transporte público se encuentran en bancarrota, aseguró el presidente de Turicun, Vicente Noya. “Realmente estamos en quiebra; esa es la realidad. No podemos subsidiar el servicio, no tenemos de dónde, no hay forma”, indicó, luego de que el gobierno municipal les negara el incremento en las tarifas del servicio, ya que para las rutas en la zona urbana pretendía pasar de 9.50 a 14.50 pesos, aunque los operadores cobrarían 15; y en la Zona Hotelera, pasar de 11.50 a 16.50, para terminar cobrando 17 pesos.
Oligopolio
Por años, estas dos empresas han operado como monopolio el servicio del transporte, afirmó el exsíndico de la administración 2005-2008, José Luis Pineda Díaz. De acuerdo con el Programa Municipal de Desarrollo Urbano 2018-2030, las rutas de transporte en Cancún se dividen en seis áreas principales: Zona Hotelera, urbana, Puerto Juárez, franja ejidal, Delegación Alfredo V. Bonfil y las colonias irregulares, que surgieron porque la planeación fue rebasada por falta de previsión de vivienda, equipamiento e infraestructura para la población que migró a este destino en busca de mejorar su situación económica. Por ello, es más evidente la ineficiencia del transporte público, aunado a la mala calidad del servicio, cobertura y seguridad.
Hay 36 rutas establecidas. Autocar tiene 18 autorizadas; Turicun, 28; la Sociedad Cooperativa de Bonfil, 20; y la Sociedad Cooperativa de Transporte Maya Caribe, 28. El servicio público en autobuses urbanos tiene varios itinerarios que se superponen debido al excesivo número de autorizaciones a concesionarios, aunque ni el diagnóstico del organismo municipal ni el Instituto de Movilidad de Quintana Roo (Imoveqroo) han presentado número totales de unidades que operan en Cancún, ni un estudio de costos y ganancias, o un informe de cuántos pasajeros movilizan anualmente.
Un reciente estudio de la Secretaría de Infraestructura Comunicaciones y Transportes determinó que Cancún tiene un transporte desorganizado, deteriorado, inseguro y poco confiable, mientras que las empresas concesionarias, como Autocar, Turicun, Maya Caribe y Bonfil, incumplen condicionantes y pretenden incrementos en tarifas, aduciendo inflación e incrementos en gastos de operación.
Los representantes de Turicun, Autocar y del Sindicato de Taxistas “Andrés Quintana Roo” han estado siempre al servicio del gobierno en turno, a cambio de privilegios. Por ejemplo, los líderes sindicales, en diferentes épocas, han llegado a regidurías y diputaciones locales, como el exlíder sindical Rubén Carrillo, quien ocupa una curul en la XVIII Legislatura de Quintana Roo y defiende diversos intereses, situación que lo ha puesto en disputa con los agremiados, quienes en manifestaciones solicitaron su remoción, a lo que tuvo que acceder.
Como es de dominio público, durante las campañas políticas, los candidatos solicitan apoyos a los concesionarios de transporte para el traslado de la población a eventos masivos o el día de las votaciones, como ha quedado de manifiesto en fotos electorales.
Inegi
En las Estadísticas de Transporte Urbano de Pasajeros que maneja el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi), se omite información sobre el transporte en Cancún, pese a ser el principal destino turístico de México y el que recibe la mayor cantidad de visitantes extranjeros en el país. Las ciudades que incluye en sus reportes son Ciudad de la Zona Metropolitana del Valle de México (área metropolitana de Ciudad de México y los municipios conurbados del Valle de México), Guadalajara, Monterrey, León, Puebla, Pachuca, Chihuahua y Querétaro.
Detalla que los sistemas de transporte urbano de la Zona Metropolitana del Valle de México prestaron servicio a 161 millones de pasajeros. La distancia cubierta fue de 30.7 millones de kilómetros, lo que implicó un aumento del 1.5% respecto al 2023.
Continuará…