Más de 10 mil feligreses visitaron, hasta la tarde de ayer, la reliquia de San Judas Tadeo en la Catedral de Cancún. Llevaron globos, flores y veladoras para hacer sus peticiones al santo de las causas difíciles.
Las filas de familias se dejaron ver desde las primeras horas del domingo. Para venerar las reliquias se organizó una zona para que las personas que quisieran estar cerca.
Antes de entrar se escucharon las alabanzas, música y aplausos, mientras vendedores de artículos religiosos ofrecían rosarios, bultos u pósters de San Judas. Para mitigar los efectos del calor, los presentes llevaron sombrillas y gorras, además de bancas o alguna silla plegable para estar cómodos, además de bebidas refrescantes para mantenerse hidratados.
Se trata de una reliquia de primer grado, de una escala de clasificaciones que consiste en tres niveles. En el primer grado están aquellas que vienen de restos del cuerpo o sangre del santo; en el segundo grado están los objetos que le pertenecieron o pedazos de sus vestimentas, mientras que el tercer grado es un objeto que ha estado en contacto directo con una reliquia de primer o segundo grado. En esta ocasión consiste en un fragmento de hueso, colocado en un relicario en forma de brazo.
María Hernández dijo sentirse muy feliz y con mucha emoción porque se siente una energía diferente, además de venir a rendir homenaje a quien le ha cumplido varios milagros.
Para Alejandra Suarez fue un momento muy emotivo, porque está pasando por momentos difíciles al quedar viuda hace unos meses, pero llego con toda la fe, para salir adelante con su familia. “En estos casos lo único que nos queda es rezar y que mejor que sea delante de algo tan sagrado como lo es esto”.
El día de hoy la reliquia estará en la iglesia de María Desatadora de Nudos; para el 15 de octubre visitará Playa del Carmen; el 16, la parroquia de Corpus Christi, en Cozumel; el 17, Felipe Carrillo Puerto; el 18, José María Morelos y el 19, 20 y 21 en Chetumal, desde donde partirá hacia Tabasco.
Obispo agradece a cancunenses por su fe
Los feligreses también escucharon la misa dominical, donde aproximadamente 500 personas escucharon la palabra a través del Obispo de la Diócesis Cancún-Chetumal Pedro Pablo Elizondo.
En su mensaje dominical el obispo agradeció a los fieles por estar presentes en esta actividad, pero recalcó la importancia de ser mejores personas cada día y de tomar el ejemplo de San Judas Tadeo quien llevo su fe a tal nivel de llegar a hacer un ejemplo para los demás en caminos de Dios.
Afirmando que debemos de entender que los temas materiales no son más que comodidades que al final nos llevan a tener una mejor vida en este mundo, pero dejamos de lado el valor espiritual, mismo que debemos de tener cuidado y estar alimentando cada domingo al asistir a la eucaristía.
“Durante esta semana de fiesta en la iglesia católica, Se debe de tomar como ejemplo de vida a San Judas Tadeo que, al portar un escudo en el torso, significa que está anunciando a Jesús, por la vida, por lo que debemos ser anunciantes de la fe y vivir siempre de la mano de cristo, para así llevar una vida digna de hijos de Dios”.
Pide Iglesia católica mayor altruismo
La Iglesia católica invitó a fieles y sociedad en general para que se unan en los proyectos de ayuda al prójimo en las diferentes modalidades que la sociedad misma ha creado, como la Donación de Órganos.
En una fecha tan importante como el Día mundial de la Donación de órganos y tejidos, el Pedro Pablo Elizondo Cárdenas, L.C. obispo diocesano de la diócesis de Cancún-Chetumal, hace el llamado a la población en general para general un cambio de vida.
Asegura que si bien la iglesia se encarga de mantener la fe y llevar a las personas por los senderos de fe, sanando el corazón y sanando el alma, también debemos entender que la vida humana se mantiene del apoyo mutuo y la convivencia misma de la especie.
Entonces debemos entender de que como seres humanos tenemos que perder el miedo a las diferentes campañas realizadas por las diferentes instituciones médicas, las cuales solo buscan preservar la salud de nosotros mismos.
Por eso se recalca la importancia y se destaca que la iglesia como tal no está en guerra con la medicina la cual nos lleva a tener una vida plena, entonces solo queda en nosotros como personas de fe, de amor al prójimo perdamos el miedo a no solo a participar de un programa de donación de órganos que mejora la vida del prójimo, si no de igual manera en diferentes programas que en la actualidad solo buscan el bien de la humanidad.
Al final de la entrevista termino aplaudiendo estas acciones y reconociendo la labor que desempeñan las personas que realizan este tipo de campañas y que las llevan con éxito a mejora de la calidad de vida de un ser humano, en un mundo actual donde este tipo de cultura es casi nula.