Luego de que la titular de la Secretaría de Gobierno asegurara que el 15 de diciembre se abriría nuevamente la circulación en la segunda entrada de Chetumal, este lunes informó que no será así, debido a que no existe certeza de que los trabajos que aún se realizan en ese tramo estén concluidos para el viernes, como se había planeado, por lo que esta vialidad continuará cerrada de manera indeterminada.
Al respecto, la secretaria de Gobierno, Cristina Torres Gómez, responsabilizó a la empresa constructora que se encarga de los trabajos que se realizan en dicho tramo, señalando que la constructora maneja sus propios tiempos de trabajo, los cuales no coincidirán con lo que las autoridades habían previsto anteriormente, por lo que aseguró que en cuanto se concluya con la obra se informará a la ciudadanía la fecha de la apertura.
Cabe mencionar que los chetumalenses llevan más de un año lidiando con esta situación que se convirtió en un dolor de cabeza para quienes viajan todos los días fuera de la ciudad, a causa de los embotellamientos que hasta la actualidad se siguen presentando en la carretera de entrada y salida de Chetumal; por lo cual, los chetumalenses contaban con que, por fin, fuera liberada la carretera y se desahogara el tráfico vehicular, lo cual no ocurrirá por lo pronto.
En ese sentido, se consultó con algunos habitantes su opinión acerca del anuncio realizado por Torres Gómez, ante lo que demostraron un descontento generalizado por las afectaciones, como lo mencionó Salomón Soto: “afecta a la circulación vehicular porque obliga a usar otra vialidad, ocasionando retraso al momento de trasladarse”.
De igual manera, Daniela Patiño señaló: “yo no suelo salir a carretera con frecuencia, ni manejo, pero sé que esta situación ha traído muchos problemas para quienes sí viajan con frecuencia; incluso cuando se realizan viajes en autobús u otro transporte foráneo suelen retrasarse mucho, sobre todo, si es en horarios en los que se juntan más vehículos en la carretera”.
Por su parte, Elizabeth Ponce expreso: “la verdad, con tanto tráfico en la carretera no dan ganas de salir de la ciudad. Yo tengo una hermana que vive en Ucum y he dejado de ir a verla con la frecuencia en que iba antes por el tráfico; antes iba cada quince días, pero ahora pasan semanas sin que vaya porque no quiero quedarme atorada en la fila de carros.