El hombre que fue asesinado la noche del pasado martes, en el interior de su domicilio localizado en la calle Polyuc, del Fraccionamiento Caribe, sufrió un ataque directo, puesto que además de ser baleado mientras dormía en una hamaca, la vivienda recibió múltiples impactos de arma de fuego y las autoridades establecieron que se dedicaba a la venta de droga.
Las primeras investigaciones en torno al crimen ocurrido el pasado martes, revelaron que el ahora occiso identificado como F. J. M. A. se dedicaba a la venta de drogas al menudeo, por lo que inclusive la Fiscalía General del Estado, se encontraba investigándolo con la finalidad de acreditar su responsabilidad en ese ilícito.
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Sin embargo, al encontrarse en investigación, no se habían obtenido las pruebas que pudieran confirmar que el hombre se dedicaba a esta actividad, por lo que las autoridades sólo tenían sospechas de su vínculo con algún grupo delictivo del sur del Estado.
Según las primeras indagatorias, la noche del miércoles, el hombre se encontraba durmiendo en una hamaca, cuando al sitio llegaron dos hombres a bordo de una motocicleta, uno de los cuales se aproximó a la puerta de la vivienda que se encontraba abierta, y desde ella disparó contra su víctima quien recibió al menos dos impactos certeros en el pecho.
El segundo tripulante, se dirigió a la casa y arrojó una bomba casera conocida como “molotov” pero esta no prendió y entonces también accionó su arma en varias ocasiones contra la fachada, dejando varios impactos en la pared, de un arma que las autoridades piensan se puede tratar de un calibre 9mm, del mismo con el que fue ultimado la víctima.
La línea de investigación principal es un ajuste de cuentas entre grupos diferentes de la delincuencia, quienes se pelean la “plaza” de Chetumal, para la comercialización de drogas al menudeo en diferentes puntos de la ciudad.
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