San Felipe, Yucatán, 16 de noviembre.- La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, así como la Comisión Nacional de Areas Naturales Protegidas, aún no emiten resolución alguna en cuanto al caso del ecocidio en este puerto, donde se han talado de forma ilegal cientos de metros de mangle.
Han permitido un sinfín de irregularidades y violaciones a las leyes ambientales en complicidad con el actual gobierno municipal que encabeza Juana Baltazar y el síndico Felipe Antonio Marrufo López, reveló el secretario general de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas en el Estado de Yucatán (UNTA), Ignacio Machain Sosa, quien en compañía de Carlos Cantón Magaña y Luis Fernando Góngora dieron un recorrido en la zona, constatando que incluso los letreros de clausura se encontraban tirados y rotos.
Las autoridades ambientales se mantienen tibias ante este ecocidio que se ha cometido bajo el argumento de que los jóvenes requieren espacios para vivir, pues han actuado en contubernio con las autoridades municipales de este puerto que ha permitido la tala ilegal del mangle donde, presuntamente, continuarán una calle y construirán algunas viviendas para la población.
Estando en el recorrido, constatando la grave afectación al medio ambiente, el secretario de la Comuna, Marco Antonio Acevedo Mena, a bordo de un carropatrulla con número 1087 y acompañado de un elemento, se apersonó al lugar. El secretario informó a quien incluso llamó “el alcalde” Felipe Antonio Marrufo, conocido en el puerto como Catarino, sobre la presencia de los integrantes del UNTA y, posteriormente, el mismo secretario presentó por medio de una llamada telefónica a Felipe Marrufo con Catarino, haciéndolo pasar como “el presidente municipal”.
Tras un dialogo por teléfono, ambas partes acordaron sostener una reunión en los próximos días para que se dé solución a esta situación.
José Lafontaine Hamui, delegado de la Profepa, hasta la fecha no ha emitido un dictamen y sancionado a los que incurrieron en este delito grave al medio ambiente, causado en las áreas naturales protegidas donde hay fauna y flora nativas sujetas a protección especial. Entre las especies que fueron deforestadas figuran Aristida adscensionis, Panicum amarum, Pseudophoenix sargentii, Palma Ku Ká, Rhizophora mangle, Sporobolus pyramidatus, Xanthosoma yucatanense, Euphorbia mesembryanthemifolia, Ibervillea lindheimeri, Ipomoea violacea, Iresine flavescens, Lactuca intybacea, Laguncularia racemosa, entre otras especies, así como diversos animales propios de la región.
(POR ESTO! / Corresponsalías)