Durante este año 2018 a punto de concluir, el Albergue Temporal San Vicente de Paúl ha recibido a 5,875 personas de escasos recursos que acuden a recibir tratamientos en el Hospital “Agustín O´Horán” y se brindaron áreas para descanso a 26,567 personas. También se suministraron 107,465 comidas, además de que 6,555 personas usaron los lavaderos para lavar la ropa de sus pacientes y su familia, y 25,578 personas solicitaron servicios de baño. Es de hacerse notar, que todos estos servicios se brindan gratuitamente.
Eso informó ayer la hermana sirviente (así le llaman a la directora) de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl, María del Rosario Huerta Pérez, quien explicó que todo esto ha sido posible gracias a las personas que apoyan esta obra que, desde cualquier punto de vista, es extraordinaria.
–Hermana Rosario, ¿qué es lo que más necesita el albergue?
–Material de limpieza, cloro limpiador, bolsas, jabón, escobas, mechudos, que son cosas que casi no llegan, y también hamacas, porque las que tenemos, como se tienen que lavar cuando se va la persona, para dársela a otra no duran. También necesitamos el trabajo de personas voluntarias. No hay necesidad de que traigan algo material, con que nos ayuden basta.
Voluntarias
–¿Hay voluntarias fijas?
–Sí. Aquí están por segunda vez las Voluntarias de los Jesuitas, que vienen a ayudar por períodos de 10 meses. Ellas son tres muchachas.
–¿Y a cuántas personas albergan todos los días?
–En promedio son 80, que aquí hacen sus tres comidas.
–¿Todos son pacientes del hospital?
–No, algunas son los familiares que acompañan a los pacientes.
En esta parte, debido a que la directora tuvo que ausentarse para atender algunas cosas del albergue, continuó con la entrevista la administradora, Armandina Lizama, quien comentó que en este albergue no hay ninguna restricción de religión ni de nada, y al que quiera ir se le abre la puerta. Dijo también que las hermanas, que son 5, están allá 24 horas por 7 días a la semana.
Saturamiento
–¿En qué duermen los huéspedes?
–En camas y hamacas. Hay temporadas en que estamos saturadas y se le dice a la gente que ya no hay camas ni hamacas, sólo colchonetas para poner en el piso y, como aceptan porque es preferible a quedarse a la intemperie allá afuera del hospital, las acomodamos en el suelo.
–¿Y cuánto les dura una hamaca?
–Muchas veces no duran ni 6 meses, porque se tiene que lavar después de que la usa una persona.
–¿En esta temporada vacacional, hay menos personas?
–Curiosamente no. En realidad nosotros somos proporcionales a la población del O´Horán. Si tiene muchos pacientes, como la mayoría son de los pueblos, entonces vienen a quedarse aquí. En estos días de vacaciones hemos tenido hasta 40 personas al día.
Apoyo
–¿Y al mes, cuántas personas albergan?
–En el albergue son como 450 personas al mes, y, en comida, como 8,900 las que se sirven al mes.
–Otra cosa que es importante señalar y que me gusta mucho –explicó–, es que si por ejemplo nos llegan 10 cartones de huevo y sólo se van a utilizar 5 en la semana, a fin de que no se descompongan la directora empieza a llamar a otros albergues para que vengan por el resto. Es decir, que se les apoya dándoles todo lo que no se consume aquí.
–Realmente las personas deben saber que están bien utilizados los apoyos que nos brindan –concluyó.
–Por si alguien quiere darles alguna ayuda, ¿cuál es el teléfono de ustedes?
–Es 923 12 02 –concluyó Armandina.
(Roberto López Méndez)