Ayuntamiento de Mérida, laxo y omiso
El arquitecto Fernando Alcocer Avila señaló que hay dudas y razones fundadas para afirmar que la licencia de construcción del proyecto “City Condos. Villas del Sol” se entregó de forma irregular y que el Ayuntamiento fue totalmente laxo y omiso para permitir que se lleve a cabo.
Informamos la queja de los vecinos de las colonias de Villas del Sol, Gonzalo Guerrero y Campestre, quienes han señalado que los permisos se entregaron de forma irregular y que el proyecto generará un grave impacto vial en la zona.
Sobre el particular, el arquitecto fundador del Colegio de Arquitectos de la Zona Metropolitana de Mérida y ex presidente del Colegio Yucateco de Arquitectos, dijo que hay dudas y razones para afirmar que la licencia de construcción se entregó de forma irregular.
“En este sentido el Ayuntamiento de Mérida fue totalmente laxo y omiso en garantizar el buen vivir de la población, por lo que no se pusieron las condicionantes necesarias y las que se pusieron fueron una broma”, comentó.
Agregó que de acuerdo con el Programa de Desarrollo Urbano vigente al momento del permiso, se pusieron condicionantes que no se cumplieron y al final resultaron estudios que no resolvieron nada.
Como ejemplo, mencionó el tema vial, donde dijo que las “condicionantes” se limitaron a una lista de materiales que se deberían usar y sin ningún tipo de señalamiento para aminorar el impacto vial que habrá en la zona y que desde luego alterará la densidad.
En este tema, dijo que la zona donde se levanta este proyecto es de baja densidad y por ello se le dio un uso condicionado al proyecto, con el que debía cumplir varias “condicionantes”, que se debían cumplir a cabalidad, pero aun así no se hizo nada.
Comentó que el aumento de la densidad que traerá consigo el proyecto generará desde luego un impacto en la zona, por la cantidad de vehículos que se moverán, por ejemplo, lo que desde luego va en contra de la política que se debe aplicar a la zona de mantener las condiciones de baja densidad.
El profesional dijo que otro problema grave es que se menciona que con un estudio de impacto urbano que sea favorable se entregará el permiso, pero resulta ser que dicho estudio lo realiza el mismo empresario que llevará a cabo el proyecto.
“Aquí tenemos que el propietario es juez y parte y pues él mismo se hace su estudio y señala que su estudio es favorable y lo grave es que esta opinión del mismo empresario o de quien elabore el estudio, está por encima de la Ley, de la norma”, comentó.
Dijo que por desgracia hay otras lagunas que permitieron que se entregaran los permisos, como en el caso de la renovación automática de la licencia de construcción.
Y es que los vecinos se quejan de que la licencia original se dio en el 2014 y ésta se renovó automáticamente cuando se solicitó nuevamente en 2017, tres años después y sin que se actualizaran los estudios de impacto ambiental y otros.
Sin embargo, Alcocer Avila dijo que la ley no menciona que dichos estudios deben renovarse pues la norma únicamente habla de que la licencia se debe renovar cuando ésta haya vencido. En este sentido dijo que se trata de lagunas en la Ley que fueron aprovechadas.
(David Rico)