DZONOT MEZO, Tizimín, Yuc., 27 de noviembre.-Cuarenta y una fugas de agua en esta comunidad indígena tienen desesperadas a las familias y autoridades porque Límber Santiago Vázquez Dávila, titular del Departamento de Agua Potable del Ayuntamiento ha mentido y negado la ayuda.
Lo anterior fue denunciado ante el POR ESTO! la noche del martes por el comisario municipal, César Can Herrera; y Yuridia Cupul Uh, presidenta del Comité de Agua Potable; de esta comisaría ubicada a una hora y media de la cabecera municipal.
Durante el recorrido que el reportero de esta casa editorial realizó acompañado de las autoridades de este pueblo, pudo confirmar que efectivamente existen diferentes tipos de fuga de agua.
Algunas son a través de las tuberías de PVC y en algunos casos se aprecia que los afectados han tratado de solucionar los problemas colocando cinta negra, pero todo parece indicar que el asunto va más allá.
Otras el cemento mina el agua, por lo que la lente del POR ESTO! pudo captar los chorros de agua que se desperdician las 24 horas del día, ante la apatía de las autoridades municipales que se han negado a reparar los desperfectos, según denunciaron los representantes de esta comunidad.
En este sentido, el comisario municipal dijo tajantemente que el Alcalde debe de poner gente que quiera hacer su trabajo, toda vez que cuando han pedido la ayuda Vázquez Dávila miente al decirles que “el jueves sin falta estamos allá o antes de que termine la semana”, pero pasan los semanas y nada.
Agregó don César Can que 15 días después de que acudió al Ayuntamiento para reportar estas fugas, personal del agua potable fue a la comunidad para repararlas pero sólo trabajaron dos horas y ya no regresaron. Entonces el problema persiste porque el agua se sigue desperdiciando.
“Tenemos un problema gravísimo, estamos solicitando desde hace un mes y medio la reparación de 41 fugas de agua en las casas, pero Vázquez Herrera nos dijo que mandaría tres grupos y nosotros sacamos a dos personas de la comunidad a las que les tenemos que pagar pues ayudaron a las que vinieron hace un mes pero no les pregunté por qué no se distribuían como habíamos acordado con Límber para que avanzaran en los trabajos”, señaló.
“Solamente se veían unos en una sola toma pero apenas habían trabajado dos horas y muy molestos por los que les pedí que ya no siguieran trabajando y argumentaron que tenían que ir a checar, se fueron y no volvieron”, agregó.
Por esta situación, el comisario afirmó que ha llamado por teléfono al Ayuntamiento y Límber sólo le da largas, pero la fecha en que vengan no se ha dado a pesar de que es una prioridad cuidar el agua.
“Siempre que hablo por teléfono me dice Límber que el jueves, nosotros seguimos reportando, siempre que voy cada 15 días lo reporto personalmente también y me dicen “es que sabes comisario estamos en graves problemas, no tenemos vehículo, vamos a ver qué vamos a hacer y te aviso. No sale esta semana y te mando personal para que vayan a arreglar ese asunto y se acaba la semana y empieza la otra y nada no tenemos buena respuesta”.
Por su parte, la señora Juana Chan Puc es una de las afectadas como muchas más que viven las consecuencias.
“Yo también tengo este problema, no nos atienden bien, compré mi llave pero no la he podido poner, nos tienen abandonados, aquí no tenemos ayuda de ellos porque dicen que no tienen recursos”, aseguró.
“El problema es por dentro de la base, les decimos a los del Ayuntamiento que aquí no contamos con plomero para contratarlo, creo que es su deber apoyarnos para repararlo y si hacen falta accesorios deberían de ponerlos ellos porque aquí es una comunidad pequeña, no se vende un pedazo de tubería. Tendríamos que salir a la ciudad a comprarlo, entonces ellos como tienen plomero vienen y nos dirían donde está el problema, romperían y cambiarían la tubería. Son 41 tomadas dañadas de 105 que tiene el pueblo”, expresó.
Dijo la señora Yuridia Cupul Uh, presidenta del Comité de Agua Potable: “Siempre que voy a pagar el recibo a Tizimín paso al Ayuntamiento a preguntarles cuándo vienen a repararnos las fugas y sólo una vez vinieron pero ya no volvieron, de hecho fui la misma semana que fue el comisario y me dijeron que el jueves o viernes porque no tienen camioneta disponible”.
“A veces nos dicen que no hay personal, que están ocupados todos y mientras el agua se está tirando, no tenemos respuesta pronto porque esto ya tiene más de un mes. El recibo últimamente ha estado llegando de mil 600 a mil 800 pesos y lo dividimos entre todos y nos toca de a 25 pesos, pero tememos que el próximo recibo nos llegue más caro por tanta fuga, de hecho ya nos habían cortado la corriente del medidor del agua potable. Vino muy caro el recibo y se cambió el Comité y ahora no dejamos que se llene el tanque por las fugas, pero aun así el agua está saliendo, hay algunos en los que sale mucha agua y otros que está goteando pero son fugas. Estamos desesperados porque ya mero llega diciembre, es cuando los recibos se elevan más y si hay fugas más vamos a pagar”, manifestó doña Yuridia.
(Texto y fotos de José Luis Díaz Pérez)