Cientos de personas han acudido al asilo Brunet Celarain desde el pasado 12 de diciembre, a visitar el Nacimiento que cada año se instala en ese hogar para ancianos, considerado como uno de los más detallistas para explicar la historia de Cristo, desde el anuncio a la Virgen María de que iba a concebir al hijo de Dios hasta los doce años de edad, de acuerdo con información proporcionada por la religiosa Isabel Rivera Valentín.
La hermana Rivera Valentín amablemente recibió a los representantes de POR ESTO! y los llevó hasta el salón donde se cambió el Nacimiento, que es considerado uno de los más grandes en el Estado, pero pocos saben que para lograr esa bella obra, Sor Isabel y un grupo de personas tardaron casi tres meses para cambiarlo de un sitio a otro, toda vez que consta de poco más de mil figuras, varias de ellas animadas, y es acompañado de música de Navidad y luces de colores que destacan todo el conjunto.
El tradicional Nacimiento del asilo Brunet Celarain recrea los pasajes más importantes de la historia de Cristo, desde la “Anunciación” hasta los doce años de edad, que es cuando se pierde a sus padres en el templo.
Nacimiento que año con año es visitado por cientos de personas porque tiene como función principal la de contar la más hermosa historia bíblica, con el propósito de evangelizar.
Los horarios de visita son de 10 de la mañana a 1:30 de la tarde, y de 4 de la tarde a 8 de la noche.
Sor Isabel dijo también: “Esta es una historia que hay que verla. No es decirlo nada más. Está contada desde la ‘Anunciación’, luego tenemos la ‘Visitación’ de María a su prima Santa Isabel; tenemos ‘El sueño de José’, las posadas, el nacimiento, el anuncio del ángel, la circuncisión, la purificación de María y la presentación del Niño en el templo, así como la parte de Herodes cuando manda a ejecutar a los niños, que son las matanzas, y tenemos también la huida a Egipto, la Sagrada Familia viviendo en Nazaret y, por último, tenemos a Jesús con los doctores de la Iglesia”.
Comentó que precisamente en la liturgia de ayer se recordó el pasaje en el que José decide repudiar a María en secreto y alejarse de ella, para que quede como el malo de la película, pero un ángel se le aparece en sueño y le dice que no tema en escoger a María como esposa, porque es obra del Espíritu Santo y cuando está a punto de nacer, por un edicto del César, manda a empadronarse a los habitantes de Egipto y José, que era de Belén, acude a ese lugar y es ahí donde piden posada en una cueva y donde nace Jesús.
Por lo tanto -dijo la religiosa-, debemos tener muy en cuenta que la Navidad no es sólo la fiesta y los regalos, la Navidad es Dios que se encarna para que el hombre sea salvado. Dios es el amor y, si amamos a Dios, automáticamente tenemos que amar al ser humano, al amigo, al que está junto, al vecino, tenemos que amarnos todos, entonces el mundo sería un mundo de paz, un mundo de justicia, si todos viviéramos ese amor que vino Cristo a darnos, esa paz que vino Cristo a darnos en el nacimiento, que no termina ahí, termina en la cruz y después en la Resurrección.
Figuras en movimiento
Explicó que el nacimiento cuenta con varias figuras en movimiento: San José en la carpintería, las ovejas, las fuentes, el ángel que aparece en la “Anunciación”, el molino, las ovejitas, y el Niño también tiene movimiento. Las figuras son armadas con la ayuda del electricista Luis Chi.
Recordó que comenzó a instalar el Nacimiento en noviembre y terminó a principios de este mes, porque las visitas comenzaron el 12 de diciembre.
El mensaje a través del Nacimiento -indicó Sor Isabel-, es como una catequesis: lo que ocurrió el día de Navidad, porque a veces nos dedicamos a las fiestas, a las posadas, pero, ¿por qué ocurren las posadas?, ¿por qué ocurre la Navidad? Pues porque nace el Niño Dios hecho hombre, se engendra en carne de la Virgen, se hace hombre y para salvarnos, para la salvación nuestra.
Es Dios que se da al hombre y nos enseña el mensaje de la humildad y la pobreza en el establo de Belén, también de la sencillez, pues no había sitio en la posada, entonces se traslada a una humilde cueva donde están el asno, la mula y el buey.
Finalmente, dijo que gracias a que Dios se hizo hombre, mañana (24 de diciembre) celebramos el cumpleaños 2020 de Jesús, que cambió la historia y hasta el calendario, pues ahora hablamos de años antes o años después de Cristo.
(Víctor Lara Martínez)