Ninfa Delia González Leal, titular del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), dijo ayer que la tortura es un problema generalizado en México y Yucatán no es la excepción, por lo que se trabaja fuerte para erradicar este mal.
La funcionaria de la CNDH fue entrevistada en el Congreso del Estado a donde acudió como invitada a la presentación del informe anual del presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Yucatán, Miguel Oscar Sabido Santana.
“Este es un problema mundial, no es exclusivo de una Entidad y el mecanismo tiene como objetivo primordial visitar los lugares donde haya personas privadas de su libertad y ver que no se susciten hechos de tortura o maltrato.
“Y esto significa no sólo en reclusorios, sino que pueden ser albergues infantiles o de personas mayores, hospitales psiquiátricos, centros de rehabilitación para personas que sufren alcoholismo o toxicomanía, cualquier lugar donde haya una persona privada de su libertad”, expuso.
Panorama nacional
—¿Aquí en Yucatán se han registrado casos?, se le preguntó.
—“Aquí en Yucatán y en todas las Entidades Federativas, y el compromiso de México país es erradicar la tortura”, respondió.
Dijo que a nivel nacional se visitan las agencias del Ministerio Público para ver que se respeten los derechos de los detenidos. Dijo que, al momento de la detención, es cuando una persona está más expuesta a sufrir tortura o maltrato.
“Tenemos un panorama nacional y nos dedicamos a la prevención, a que esto no suceda y cuando suceda, ya es tema de diferentes visitadurías de la CNDH y de la Fiscalía”, mencionó.
Agregó que en Yucatán también se realizan estas visitas y que también se busca que las diferentes Entidades estén armonizadas con la Ley General de Prevención, Investigación y Sanción de la Tortura.
“La tendencia es que suceden estos hechos y tratamos de hacer el mejor trabajo para erradicar la imagen de las condiciones en México; de las prácticas o violaciones a derechos humanos, la tortura y el maltrato a una persona que está privada de su libertad es lo que más ofende a la dignidad humana”, señaló.
(David Rico)