La Comisión del Medio Ambiente del Congreso del Estado comenzará a analizar en breve la iniciativa para modificar la Ley para la Gestión Integral de los Residuos, que busca la eliminación y la consecuente prohibición de bolsas plásticas para fines de transportación, carga o traslado de mercancías, así como de popotes plásticos.
El presidente de la citada comisión, el diputado Harry Gerardo Rodríguez Botello Fierro, destacó que además se buscará enriquecer la iniciativa presentada por el Gobierno del Estado, para que también se considere dentro de la prohibición a los artículos de unicel, que es un producto altamente contaminante.
Explicó que lo que plantea la iniciativa es ir eliminando de forma gradual el uso de las bolsas plásticas para acarreo, es decir, aquellas que se entregan en los comercios para la transportación o carga de la mercancía. Sin embargo, la prohibición abarca, de acuerdo con la propuesta, aquellas bolsas de primer uso, es decir, las que no han pasado por un proceso de reciclaje.
Una de las modificaciones a la ley es al artículo 31, que agrega una fracción que prohíbe “facilitar o entregar bolsas plásticas a título gratuito o de manera onerosa en establecimientos mercantiles o comerciales al consumidor final, así como popotes plásticos”. El ordenamiento establece que las bolsas plásticas son “aquellas que se utilizan para la transportación, carga o traslado de productos al consumidor final”.
El legislador del PVEM explicó que, de acuerdo con la propuesta, los negocios no podrán entregar, de aprobarse la iniciativa, bolsas para la mercancía que no sean recicladas.
Agil degradación
La ley propone en este sentido una excepción y establece que quedarán exentas de la prohibición “las bolsas y popotes que hayan sido producidos incorporando un porcentaje mínimo de material reciclado o que la fabricación de dichas bolsas de plástico sea con materiales y procesos de tecnología que permitan su ágil degradación, de conformidad con las normas oficiales de la materia”.
En cuanto al uso de popotes también quedaría prohibido su uso y, por ende, la entrega por parte de los establecimientos, aunque se establece en la propuesta que “los establecimientos de alimentos, restaurantes, bares y similares deberán disponer de popotes biodegradables para personas con algún tipo de discapacidad”.
Explicó que la iniciativa sólo abarca el tema antes mencionado, referente a las bolsas para carga y transporte de la mercancía, pues no se prohíbe la comercialización de otro tipo de bolsas, como las de basura u otras.
La propuesta establece que los negocios dedicados a la venta de este tipo de productos deberán también eliminar los que no entren en el supuesto de la ley y sólo podrían vender productos reciclados y biodegradables.
Ampliar la iniciativa
Botello Fierro dijo que, en su caso particular, ya se venía trabajando en una iniciativa similar a la que entregó el Ejecutivo y, en este sentido, tratarán de armonizar ambas propuestas. Dijo que en el seno de la comisión se trataría de enriquecer la propuesta para que, además de las bolsas de plástico y los popotes, se considere la prohibición de vasos y materiales de unicel, producto que es altamente contaminante y que se entrega, por ejemplo, en la comida que se vende para llevar.
En este tema, explicó también que no se trata de prohibir la venta de productos de unicel, sino de ir transitando a la eliminación y, por ende, a la prohibición de los platos, vasos y artículos de este material que se entrega para el traslado de alimentos.
Dijo que, en el caso del unicel, no hay productos reciclados porque es un material que es muy difícil de reciclar y muy caro, además de que cuando se lleva a cabo el proceso se contamina la capa de ozono.
De acuerdo al planteamiento de la ley, de forma gradual también los negocios deberían eliminar la venta de este producto, pero el tema todavía se debe analizar en comisiones.
Opciones
Expuso que, de aprobarse y entrar en vigor las reformas a la ley, los negocios tendrán que optar por el uso de bolsas de material reciclable o biodegradable, como de hecho se hace ya en muchos de ellos, así como los negocios que venden comida para llevar y entregan recipientes de unicel, tendrán que usar otros materiales como de plásticos biodegradables.
Reiteró que ya muchos negocios entregan bolsas biodegradables e incluso pudiera pasar que la bolsa se empiece a cobrar, además de que hay también negocios que usan las mismas cajas de cartón de los productos para la carga de las mercancías que venden.
Gradualidad
La propuesta del Ejecutivo plantea una entrada en vigor de la norma de forma gradual. Se plantea que la transición sea gradual hasta lograr la sustitución, eliminación y consecuente prohibición de bolsas plásticas entregadas a título gratuito o de manera onerosa en establecimientos mercantiles o comerciales al consumidor final, así como de popotes plásticos, que se realizará de la siguiente manera:
Los establecimientos comerciales que se encuentran en las inmediaciones de cenotes, áreas naturales protegidas y reservas ecológicas del Estado, en un plazo de 6 meses a partir de la entrada en vigor de decreto.
Para los supermercados, tiendas de autoservicio, farmacias, tiendas de conveniencia, mercados, restaurantes y similares, tendrán un plazo de 12 meses a partir de la fecha de publicación del decreto.
En el caso de los establecimientos dedicados a la venta al mayoreo y al menudeo de los productos señalados, en un plazo de 18 meses, contados a partir de la entrada en vigor del decreto.
Concluidos los plazos señalados, todos los establecimientos deberán llevar a cabo la sustitución definitiva.
(David Rico)