Miembros de la Sección 10 del Sindicato Nacional de Trabajadores del Sistema de Salud en Yucatán demandaron ayer la reinstalación de los 43 agremiados que fueron despedidos por la administración estatal sin justificación alguna ni liquidación de por medio.
Encabezados por el secretario general de la agrupación, José Maldonado González, un grupo de trabajadores se apersonó a la Secretaría de Salud con la intención de entregar un oficio dirigido al titular de la dependencia, Mauricio Sauri Vivas, pues señalaron que reiteradamente han solicitado audiencia, pero sin resultados.
Ayer no fue la excepción, luego de manifestarse públicamente y de declarar ante los medios de comunicación, se encaminaron a las instalaciones de la Secretaría de Salud para entregar un nuevo oficio, pero se toparon con la sorpresa de que el personal de seguridad privada que resguarda el sitio les cerró la puerta, lo que desató su enojo.
Luego de un rato de discusiones y ante la pésima decisión de la Secretaría de Salud de cerrarles la puerta, los manifestantes se abrieron paso a empujones y se llevaron entre las patas a una mujer de seguridad privada, a la que se le había dado la encomienda de no dejarlos pasar.
Advertencia
Ya dentro de las instalaciones se le permitió a un grupo de inconformes entregar un nuevo oficio en las oficinas del Secretario de Salud, lo que hicieron, pero advirtieron que dan de plazo hasta al jueves para tener una respuesta, ya que de lo contrario tomarán otras acciones más radicales.
Maldonado González expuso que el sindicato es totalmente legal, con número de registro 6899, pero se les ha negado su reconocimiento. Dijo que ya despidieron a 43 trabajadores, además de que personal cercano al Secretario de Salud hostiga a otros.
“Hace varios meses que estamos pidiendo audiencia y hemos entregado 11 oficios (12 con el de ayer) solicitando audiencia, por lo que el señor está violando la ley por no darnos derecho de audiencia. Todo está en orden en nuestro sindicato, con 30 mil agremiados en el país y 300 acá en Yucatán”.
“Son 43 los afiliados que han despedido y 3 de ellos con 40 años de antigüedad y que fueron removidos del Hospital Psiquiátrico y otros lugares, y hay amenaza de que nos quieren mover a más gente y son gente adulta que amenazan con cambiar a otro hospital”.
Discriminación
“El Secretario de Salud no nos ha querido atender y obviamente nos está discriminando, porque le da preferencia a otros sindicatos y eso no se vale. No se quiere sentar con nosotros a dialogar”, expuso.
Dijo que los trabajadores que han sido afectados no han incurrido en ninguna acción que justifique su despido; un día llegaron a su centro de trabajo y no pudieron checar y les dijeron que ya están dados de baja.
Aseguró que, en algunos casos, a los despedidos sus jefes inmediatos les dijeron que “están siendo despedidos por instrucciones del Secretario de Salud”.
“Por ello exigimos que nos reciba para sentarnos a ver qué está pasando, que nos reciba como sindicato y que nos reinstale en nuestros respectivos cargos”, señaló.
Reiteró que a los que han sido despedidos no se les liquidó conforme a la ley e incluso a los que despidieron en diciembre no se les dio la parte proporcional de aguinaldo ni sus vales que les correspondían.
Añadió que hay despedidos del Hospital O’Horán, de Ticul, de Valladolid y otras áreas. Dijo que, en el caso de los agremiados, al parecer los están despidiendo por discriminación a su sindicato.
Además, señaló que los despidos también están relacionados con el proyecto de federalización y los trabajadores iban a adquirir sus bases en noviembre, y ahora al quedarse fuera de la Secretaría no pueden acceder al beneficio.
(David Rico)