Yucatán

Voces de vida

Volver a nacer

Probablemente cualquiera considere que es una completa locura, sí, el decir que estoy volviendo a nacer y se preguntarán: ¿qué te pasa? ¿Por qué rayos dices eso? Muy sencillo, hace mucho tiempo me encontraba en un abismo sin salida, desperdiciando los años que aún hacen falta por vivir, estaba completamente perdida

Crecí en una familia disfuncional, mi padre cuando bebía de más, se alteraba con los reclamos de mi madre por llegar ebrio a casa, discutían, se gritaban tanto que llegaban a los golpes. La mayoría del tiempo yo veía todo, crecí con violencia, viviendo violencia y formando parte de esa violencia porque mis padres me golpeaban, mi madre me gritaba, me insultaba, y con sus palabras me hacía sentir menos, que nada valía y crecí creyéndolo.

Uno de los fundamentos o razón principal, por la cual a veces perdemos el sentido a todo, es que sentimos y vivimos creyendo la falsa realidad de que nada valemos, que como seres humanos no merecemos vivir, nos aferramos tanto a lo que nos hacen daño o a quienes nos lo hicieron y no nos damos cuenta que al mismo tiempo nosotros mismos nos hacemos daño, nos volvemos tan crueles con nosotros mismos y perdemos el sentido de seguir viviendo.

Yo, en lo personal, era muy dura conmigo, hasta hace poco seguía pensando que lo mejor era terminar con mi vida de la manera más fácil: suicidándome; fue entonces cuando entendí y sin nadie a mi alrededor, entendí que todo fue en vano, pues siempre me he tenido a mí misma.

Cuando más perdida me sentía, una amiga me recomendó hace un año a tomar terapia, lo que al principio me dio miedo porque estaba yo muy encerrada en mí misma y me invitaron a un grupo llamado Historia de vida, que es proyecto del Dr. Gaspar Baquedano, al igual que el grupo La Esperanza. Al principio fui y no hablaba, sentía que nadie me comprendía, y no me servía de nada, pero seguí yendo, y al escuchar la historia de las compañeras, me hizo entender que sí necesitaba ayuda; siento que hice lo correcto, alcé la voz y pedí ayuda, con el único objetivo de estar bien por mí, y por seguir viviendo, y vivir por y para mí.

Hoy sigo aprendiendo a disfrutar la vida como si no hubiese mañana, así como el ave Fénix, renacer de mis cenizas.

Me llamo Ana y esta es parte de mi historia. Y como dice una canción de una mujer que admiro mucho: “No te rindas nunca, siempre alza la voz, no dejes de creer. No te quedes con tu nombre escrito en la pared… No pares nunca de soñar, y no tengas miedo a volar, vive la vida, no te quedes callada y pide ayuda”.

Anita Cruz Alpuche

CONTACTO: Para atención directa, acuda al Hospital Psiquiátrico “Yucatán”. Con referencia médica para la atención al suicidio, en los momentos de desesperanza, contactar al Programa Integral de Atención al Suicidio (PIAS) del Hospital Psiquiátrico, Tel. 6 11 01 94, de lunes a viernes en horario de oficina. Estamos también en Radio Universidad 103.9 FM, todos los jueves a la 1 p.m. con repetición los domingos a las 4 p.m. Contacte también a los siguientes correos: programapias@yahoo.com y programapias@hotmail.com, En Facebook, “Grupo La Esperanza PIAS”.