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Con motivo de que ya se aproxima el VII Congreso Eucarístico Nacional, que tendrá lugar del 20 al 22 de septiembre e incluirá en forma simultánea una Expo Católica, y del 18 al 20 del mismo mes un Simposio Teológico, el Arzobispo Gustavo Rodríguez Vega explicó ayer en rueda de prensa algunos aspectos importantes de esta celebración:

“Es necesario que estos congresos sean un signo auténtico de fe y caridad, por la plena participación de la Iglesia local y por la manifestación de la unión con las demás Iglesias. “Más que un evento social, es un acontecimiento de fe y de cultura para formar el Cuerpo místico de Cristo, y que el mundo conozca mejor el Misterio de la Eucaristía.

“Los congresos eucarísticos no son antiguos en la Iglesia, son más bien recientes. Se trata de una convocatoria que se hace en la Iglesia para reunirse y reflexionar en lo que significa el sacramento de la eucaristía, y en cómo adorar al Señor presente en este sacramento.

“Los congresos eucarísticos que surgieron recientemente en la vida de la Iglesia como una peculiar manifestación del culto eucarístico, deben considerarse como una estación a la que la comunidad local invita a toda la diócesis, o una diócesis invita a las demás diócesis de toda una región, nación, o aún de todo el mundo para que, unánimemente, se dediquen a considerarse públicamente con vínculos de caridad y de unidad”.

Gran devoción en Yucatán

En esta parte, el Arzobispo señaló: “Hay una gran devoción aquí, en Yucatán, por el culto a la Sagrada Eucaristía. Me decía un párroco de un pueblo cómo la gente ha respondido con mucho júbilo ante la convocatoria de las 40 horas de adoración continua al Santísimo Sacramento. Y eso se ve en todas las parroquias y, además, en todas las capillas de adoración perpetua. Así es que, pues nunca será suficiente el ánimo para toda nuestra población, pero también es compartirlo con gente de todo México que viene a este congreso”.

“Por otra parte, les recuerdo que el lema: ‘Pueblo de Dios, levántate y come, el camino es largo’. La inspiración, que después fue aprobada por los padres que forman el equipo del congreso, me vino a mí al pensar en el proyecto global de Pastoral de México, ese proyecto responde a aquellas palabras que dirigió el Papa Francisco a los Obispos cuando vino a México, y que nos pedían salir adelante, no atrasarnos en las respuestas que necesita nuestra feligresía y tener un proyecto de largo alcance. Por eso sale este proyecto. Pero algunos no entienden el largo proyecto hasta el año 2033 cuando se van a celebrar 2 mil años de la redención, y de aquí al 2031, cuando se van a celebrar 500 años de las apariciones de la Virgen de Guadalupe. Por eso yo pensé en el texto: El camino es largo.

Hay que pensar que es largo, pero también se necesita a corto, a mediano y también a largo plazo. El proyecto global así es. Y me acordé del pasaje donde el Profeta Elías va por el camino desfalleciendo, lo están persiguiendo a muerte y él ya está desesperado. Cae desmayado, sin fuerzas porque, además, hay una grande sequía en la región, y así desmayado un Ángel lo despierta y le dice: Levántate y come. Y él despierta y ve un pedazo de pan y un jarrón de agua, y se alimenta y se vuelve a quedar dormido. Y luego el Ángel lo vuelve a despertar y le repite: Levántate y come, el camino es largo.

El camino es largo

“Inspirado en ese pasaje pensé yo en el pueblo de Dios: ‘Pueblo de Dios, levántate que el camino es largo’. El pueblo de Dios se alimenta con la Palabra de Dios y se alimenta con el sacramento de la Eucaristía. El camino es largo. Es el camino de la fe. Además, es pesado y difícil por todas las contradicciones y todo el alejamiento de la fe de tantas personas. Por eso levántate y come: el camino es largo: Ese es el fundamento de este lema que nos va acompañando a nuestro Congreso Eucarístico, y que ya se canta en muchas parroquias de Yucatán”.

La rueda de prensa tuvo lugar en el Centro Comunitario de la Parroquia de Itzimná y participaron en ella también el Obispo Auxiliar, Pedro Mena Díaz; el padre Jorge Martínez Ruz, vocero de la Arquidiócesis; el padre Juan Pablo Moo Garrido, coordinador general del Congreso, y el padre Cristhian Cáceres, coordinador de la Misa.

(Roberto López Méndez)

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