Chagas, enfermedad rezagada en México y en Yucatán

En México y en Yucatán el Chagas es una enfermedad rezagada, en parte porque a pesar de ser prevenible las autoridades no la han atendido como lo que es: un problema de salud pública.

Eso dijo ayer la Dra. Alba Rocío Valdez Tah, quien explicó que se van a cumplir 110 años de que se descubrió el Chagas, pero se ha hecho muy poco para atenderla, diagnosticar a la gente y para tratarla. Además no hay campañas de promoción para que la gente se entere de ella y del tratamiento que se necesita cuando ya se tiene.

Alba Rocío dijo que realiza una estancia posdoctoral en el Cephcis de la UNAM con el proyecto “Voces y discursos sobre el pik: una aproximación a la Enfermedad de Chagas en Yucatán”, y que el período de este proyecto va del presente mes a agosto del 2020.

Luego agregó:

–En torno a la enfermedad de Chagas en Yucatán se articulan una diversidad de actores sociales: Por un lado están las poblaciones en riesgo en áreas rurales y urbanas, que han mantenido una larga convivencia con el Pik y tienen un acervo de saberes populares sobre los males que causa su picadura, así como a quiénes pican más, sobre su comportamiento, entre otros. Otro conjunto de actores sociales es el personal de salud responsable del Chagas, quienes están más cercanos al conocimiento biomédico y a las formas legítimas de intervenir en la problemática.

El objetivo central del proyecto de investigación que realiza la Dra. Alba Rocío es documentar las representaciones en torno al Pik y la enfermedad de Chagas entre la población de la ciudad de Mérida y entre el personal de salud encargado del tema.

También explicó que sobre la enfermedad de Chagas ha predominado la investigación biomédica, y que la realización de este proyecto es un avance en la comprensión de la problemática desde las voces y discursos de los propios actores sociales.

Pik, muy antiguo

Por último –dijo- el proyecto contribuirá a identificar criterios sobre las formas de pensar en torno a la transmisión vectorial urbana del T. Cruzi, que son claves en el diseño de estrategias para su atención.

Por otra parte, comentó que el Chagas se puede infectar por vía materna, pero no es muy probable, y también se puede tener la transmisión a través de transfusiones de sangre, lo que es importante tener en cuenta.

Hay que empezar a comprender que el pik es muy antiguo, es más antiguo que la gente, y se conoce desde hace mucho.

–¿Hay alguna otra razón para su proyecto? –preguntamos.

–Mi proyecto es parte de mi estancia posdoctoral en el Cephcis. Y voy a trabajar el tema del pik y el Chagas para evitar que la gente esté en contacto con esta enfermedad –concluyó la Dra. Alba Rocío Valdez Tah.

(Roberto López Méndez)