Yucatán

Stephen Hawking una de las mentes más prodigiosas de nuestro tiempo cuya brillantez ha sido comparada con la de Einstein

Pilar Faller Menéndez

Uno de sus principales objetivos fue acercar al hombre común a la ciencia

“Actualmente aún nos esforzamos por saber por qué estamos aquí y de dónde venimos realmente.” “Dios no sólo juega a los dados: a veces los tira donde no podemos verlos.”

Stephen Hawking

Stephen William Hawking nació el 8 de enero de 1942 y fue un Físico teórico británico cuyas discapacidades físicas y progresivas limitaciones a causa de la enfermedad degenerativa que padeció, a lo largo de su vida, ha sido uno de los físicos más reconocidos y populares que haya existido desde los tiempos de Albert Einstein.

Fue sin duda un caso particular de vitalidad y resistencia ante el infortunio que el destino le deparó, es probablemente esta circunstancia y sus descubrimientos lo que le valieron el reconocimiento mundial a sus aportaciones. Proveniente de una clase media que soportó los rigores de la Segunda Guerra Mundial, ingresó a la Universidad de Oxford en donde obtuvo la licenciatura de matemático y físico. En ese entonces era un muchacho normal que se distinguía de los demás por su brillante inteligencia e interés por las ciencias.

A los 21 años sufrió una caída y al no poder incorporarse, los médicos le diagnosticaron el trastorno degenerativo neuromuscular conocido como ELA o esclerosis lateral amiotrófica. El pronóstico no fue nada halagador ya que los médicos predijeron que acabaría con su vida en pocos años. Afortunadamente el pronóstico médico se equivocó y la vida de Stephen, a pesar de no ser la misma desde entonces, las limitaciones físicas no hicieron que interrumpiera su actividad intelectual, sino al contrario, hicieron que éstas se incrementaran.

Antes del accidente había iniciado un doctorado en Cambridge e hizo la solicitud de trabajar junto a Fred Hoyle, quien era un célebre astrónomo, por lo que su petición fue denegada, con el paso de los años Hawking agradeció tal negativa porque de haber aceptado Hoyle su petición se hubiera visto obligado a defender la teoría del estado estacionario de éste, lo que desacreditaría su descubrimiento sobre la radiación de fondo de microondas en 1965.

En ese mismo año contrajo nupcias con Jane Wayline con quien procreó tres hijos. Después de un matrimonio que duró 25 años se separaron y él se fue a vivir con Elaine Mason que era una de las enfermeras que lo cuidaba, y cinco años más tarde se casaron. Este matrimonio duró hasta el 2007.

Stephen obtuvo su doctorado en física teórica en 1966, y la pasión que sentía por el universo aumentó, por lo que sus investigaciones se centraron en la relatividad general, en particular en la física de los agujeros negros que describió Robert Oppenheimer en 1939.

Hawking se planteó una ambiciosa meta que fue la de armonizar la relatividad general y la mecánica cuántica, buscando la unificación física que permitiese conocer el universo así como los fenómenos subatómicos. En 1971 sugirió que existían numerosos objetos a los que denominó “miniagujeros negros” los cuales contenían cerca de mil millones de toneladas métricas de masa, lo cual originaría enormes campos gravitatorios que se regirían por las leyes de la relatividad.

Fue así como el estudio de los “miniagujeros negros” pudieron combinarse por primera vez con la teoría de la relatividad y de la mecánica cuántica para poder resolver el estudio de estas estructuras, de las cuales nunca se creyó que se pudiera obtener algún conocimiento. Fue en 1974 cuando propuso, de acuerdo a las predicciones de la física cuántica, que los agujeros negros emitían una radiación térmica y al agotar su energía se extinguían.

En ese mismo año lo designaron miembro de la Sociedad Real, y tres años más tarde profesor de física gravitacional en Cambridge en donde se le otorgó la cátedra Lucasiana de matemáticas en 1980, cátedra que ejercieron figuras como Isaac Newton. La cátedra la impartió hasta 2009 que fue cuando se jubiló.

Sus logros intelectuales e innumerables premios y doctorados honoris causa, no impidieron que su enfermedad avanzara, ya que debido a la inmovilidad de sus extremidades tuvo que usar una silla de ruedas, hasta que la parálisis se extendió casi en todo su cuerpo. En 1985 tuvieron que practicarle la traqueotomía por una neumonía que contrajo, lo que hizo que perdiera el habla, pudiendo comunicarse solamente mediante un sintetizador que estaba conectado a su silla, pero ni esto logró que se desmoralizara, ya que escribió otros siete libros y continuó publicando artículos e impartiendo conferencias.

Hawking fue un gran divulgador de sus estudios a pesar de la dificultad que implicaba hacerlo, pero gracias a su empeño y tenacidad pudo hacer frente a sus discapacidades físicas. Mientras se encontraba en España en 1989 para recibir el premio Príncipe de Asturias, habló sobre la importancia de que cualquier ciudadano pudiera poseer nociones científicas para poder participar en los debates sobre los avances científicos y tecnológicos a fin de evitar que todo quedara en manos de expertos.

Esto puede constatarse en sus libros más famosos como Historia del tiempo: del big bang a los agujeros negros (1988) el cual ha sido traducido a 37 idiomas con más de veinte millones de ejemplares vendidos. Su propósito era escribir un libro para un público más extenso por lo que renunció a las fórmulas y a las exposiciones para especialistas, sin abandonar el tratamiento en cuestión.

En su libro mantuvo siempre un tono de alta divulgación, el tema de los agujeros negros, su origen y el probable destino del universo. No eludió la pregunta que todos nos preguntamos al enfrentarnos a estas cuestiones: el papel de Dios en todos estos fenómenos, así como la creación del universo, para lo que Stephen Hawking abandona el riguroso tratamiento científico para especular con la metafísica.

Posteriormente escribió Agujeros negros y pequeños universos (1994) El universo es una cáscara de nuez (2002) y El gran diseño (2010) continuando con su intención todavía mayor de divulgar estos libros al público en general.

También escribió libros más especializados sobre sus teorías de los agujeros negros, sus propiedades, y la relación de éstos con las leyes de la termodinámica clásica y mecánica cuántica, en sus obras The Large Scale Structure of Space-Tieme (1973) en el cual contó con la colaboración de G.F.R. Ellis así como Superspace and Supergravity en 1981 y The Very Early Universe en 1983.

Tal fue la admiración que causó esta mente prodigiosa, que se llevó a cabo una película biográfica en vida titulada La teoría del Todo, la cual se estrenó en los Estados Unidos el noviembre de 2014 la cual protagonizó Eddie Redmayne interpretándolo a él y Felicity Jones a su primera esposa, Jane Hawking.

Su muerte causó conmoción mundial en 2018, a la edad de 76 años en su casa de Cambridge, después de haber sobrellevando una enfermedad 54 años más de los pronósticos médicos, con una mente lúcida y generosa motivo por el cual muchos sintieron su partida.