En el tercer domingo del tiempo ordinario, ayer se celebró por primera vez en todas las iglesias de la Arquidiócesis de Yucatán el Día de la Palabra de Dios, conforme a la disposición del Papa Francisco.
En su homilía, el Arzobispo de Yucatán Gustavo Rodríguez Vega recordó que el 30 de septiembre del año pasado se cumplieron 1,600 años de la muerte de San Gerónimo, quien fue el que hizo la primera traducción al latín de los textos de la Biblia que estaban en hebreo y griego.
—Él puso la Biblia en manos del pueblo para que toda la gente pudiera leer y entender las Sagradas Escrituras; la mayor parte del trabajo de este santo lo hizo en Belén, allá donde nació Jesús. Pasaron siglos para que la Biblia fuera traducida a las lenguas de cada nación; esta traducción llamada la Vulgata fue la que por todas partes, tanto en iglesias católicas como las separadas, se escuchó durante siglos y fue traducida por San Gerónimo.
—Teniendo como referencia los 1,600 años de la muerte de San Gerónimo, el Papa Francisco expidió una carta llamada Aperuit Illis que significa “les abrió”, refiriéndose al Evangelio de San Lucas en el que dice que Jesús les abrió la inteligencia a los apóstoles para que entendieran los pasajes de la Escritura. Nosotros le pedimos al Señor que también abra nuestra inteligencia para entenderla pero antes también nosotros tenemos que abrir la Biblia.
Resaltó que en esa carta, el Santo Padre manda que se celebre el Domingo de la Palabra de Dios en el tercer domingo del tiempo ordinario. Hoy es la primera vez que se celebra este acontecimiento, dijo.
Al inicio de la misa una procesión entró con una Biblia en las manos traducida al español a partir de los textos originales del griego y el hebreo.
—Se trata de un español que pueda ser entendido en toda Latinoamérica. Esta Biblia fue patrocinada por la iglesia católica de Estados Unidos y trabajaron en ellas muchas personas expertas en las Sagradas Escrituras de Latinoamérica, dos de ellas mexicanas. Fueron varios años de labor para que se lograra esta versión que tiene un lenguaje asequible a todos los países de América, apuntó.
El prelado subrayó que la importancia de la Palabra de Dios es fundamental en la vida cristiana, sobre todo cuando hay compromiso evangelizador.
Se refirió al pasaje en el que Cristo comienza a evangelizar cuando Juan el Bautista fue encarcelado, deja Nazaret en donde vivó 30 años con su familia y se fue al norte de Israel, que era Galilea de los paganos, donde el pueblo que vivía en tinieblas vio la luz.
—Y nos preguntamos ¿Qué predicaba Jesús? La conversión. Cristo dijo: “Conviértanse que está cerca el reino de Dios”; es decir, cambien de rumbo, de camino, ya que Dios está cerca, su misericordia y amor están cerca; por lo tanto, conviértanse. No basta decir soy buena persona, hay que convertirse reconociendo con toda humildad que eres pecador, pues en la vida cristiana no podemos decir ya la hice; tenemos que mantener el rumbo y para ello es necesario conversión, conversión, conversión que significa un cambio de vida porque el reino de los cielos está cerca. Llamado para todos es la conversión, llamado para algunos: síganme porque la conversión está cerca.
Jesucristo dijo a sus apóstoles: les haré pescadores de hombres; es quizá por esa razón por la que eligió un pueblo de pescadores, para que dejara en claro la alegoría y comparación: ahora serán pescadores de hombres.
Mencionó que en Yucatán hay muchos pueblos pesqueros pues que también en Yucatán se escuche el llamado a la conversión y al seguimiento de Jesús para que muchos hombres y mujeres al igual que los apóstoles sean capaces de dejarlo todo y seguir a Jesús.
Invitó a todos a aceptar el llamado, a convertirnos continuamente y a seguirlo, si es que el Señor nos llamara, y a mantenerse unidos, sobre todo a los miembros de la iglesia que no están de acuerdo con el Papa Francisco y dicen que están con el Papa Benedicto; esto no se debe, no puede y no se vale, pues el Papa Benedicto está con el Papa Francisco porque no hay más que un solo Papa, es decir, un vicario de Cristo en la tierra, solamente uno. Hizo hincapié en que siempre debe haber unidad en torno al sucesor de Pedro. También hizo un llamado de atención a los fieles de mantenerse en unidad en todos los aspectos de la vida en el trabajo, en la familia y en la iglesia porque San Pablo nos exhorta a todos con Cristo y una sola comunidad.
En la celebración eucarística el Arzobispo de Yucatán confirmó a Jessica Leticia Chan Pacheco y a Salvador Cordero Romero.
(Elena Gómez)