La presente temporada de pulpo, a pesar de la pandemia, ha dejado una derrama al sector pesquero de alrededor de 600 millones de pesos con la captura de unas 8 mil toneladas del molusco en el tercer mes que está por concluir, de la cual, debido a los temporales, cuando mucho quedan dos jornadas de pesca.
El presidente del Consejo de la Federación de Sociedades Cooperativas del Centro y Poniente del Estado de Yucatán, José Luis Carrillo Galaz, dio a conocer que el índice de los volúmenes de captura del molusco este año está muy por debajo de lo registrado en 2019.
Recordó que la temporada de pulpo inició el uno de agosto y concluye el 15 de diciembre, por lo que restan prácticamente 53 días a la captura.
Hay que tomar en cuenta que octubre y noviembre son los meses más activos en lo que se relaciona a frentes fríos que generan inactividad pesquera, no sólo en la costa sino también en la flota de mediana altura, la cual se paraliza, aunque estén afuera las embarcaciones permanecen inactivas.
La pesca de ribera es una de las más afectadas ya que tuvieron una rachita de pesca de unos cuatro días y ahora de nueva cuenta se van a la inactividad la cual, todo parece indicar, se prolongará hasta la semana entrante.
Al hablar de la captura de langosta el presidente cooperativo dio a conocer que se han capturado unas 250 toneladas de cola de langosta, que tienen un costo de 150 millones de pesos, de las cuales parte de ésta permanece en acopio, por lo cual el dinero no está circulando, tomando en cuenta que el mercado para el crustáceo es la ribera maya que se encuentra paralizada y muy poco se mueve a nivel internacional.
Pero hay esperanza que el mercado de la ribera maya comience a operar y de nueva cuenta fluya el dinero para los pescadores de langosta, la cual ha sido una de las especies más castigadas debido a que el año pasado cerró a 660 pesos y este año su precio es de 500 pesos kilo, a diferencia del pulpo que comenzó en 50 pesos y ahora llegó a 70, variando por las tallas del octópodo.
Al hablar de los mercados internacionales puntualizó que en el caso del mercado europeo, que es uno de los más grandes, el pulpo se desplaza lentamente al igual que el asiático que también, con motivo del COVID-19, tiene restricciones en sus mercados internacionales.
“Por ello tenemos que ser analíticos, los empresarios pesqueros sabemos que competimos con mercados como Marruecos, Chile y Filipinas, aunque tenemos la ventaja que el pulpo rosado maya es de excelente calidad, pero lo poco del mercado mundial seguramente se va por lo más económico del producto, además esta temporada abrió con lo que se tenía embodegado que es más de 7 mil toneladas de la temporada pasada que hay que desplazarlas a los mercados, este pulpo se compró la temporada pasada a más de 120 pesos kilo y ahora se pretende se mueva, como mencioné, a 70 pesos kilo, generando pérdidas para los empresarios pesqueros”.
En el caso de la pesca del mero su precio está a 150 y 140 el kilo de especie negrillo y rojo, respectivamente, pero son pocas las embarcaciones dedicadas a la pesquería de esta escama debido a que de las 600 embarcaciones del puerto de Yucalpetén, algunas están amarradas, quizá un centenar, más de 450 pescan pulpo y las 50 restantes capturan langosta y mero.
Aunque la Inapesca ha dado a conocer que para la actual temporada de pesca de pulpo es de 18 mil 500 toneladas para Yucatán y Campeche, con base a tiempos, por la pandemia y condiciones climatológicas, la pesca del octópodo en realidad podríamos decir que está caída, lo que afecta indudablemente al sector pesquero.
Por Julio Jiménez Mendoza