El Huracán Zeta se degradó a tormenta tropical al tocar tierras yucatecas, luego de ocasionar fuertes ráfagas de vientos en las primeras horas de ayer, así como gran parte de la mañana; sin embargo, el puerto está entre agua por el fuerte aguacero que dejó el fenómeno meteorológico.
El paso del ahora convertido en Ciclón Tropical ocasionó varias pérdidas económicas, comentó el guía de turistas Juan Carlos Durán porque mucha gente que había planeado venir al puerto a partir del día 2 de noviembre, ante la reapertura de las playas en los puertos, “pero con lo de la Ley Seca, el cierre de hoteles y restaurantes, las pérdidas al sector turístico son inminentes”.
Otro aspecto que afecta al turismo del puerto es que, con los vientos provocados por el fenómeno climatológico, el oleaje del mar es alto y fuerte, lo que ocasiona que las personas no puedan disfrutar del baño en el mar, una de las actividades más atractivas del puerto.
Ayer por la mañana, desde muy temprano, se notaban enormes olas en el mar de Celestún y la lluvia fue constante, lo que ocasionó inundaciones en algunas calles del puerto como el caso de la 2 de Marzo, también conocida como las “Palmas”, la cual quedó anegada, al igual que otras que se ubican al Sur de la población, rumbo al Puerto de Abrigo.
Hasta el momento no se tienen reportes de daños materiales en este puerto, pero la población continúa al pendiente del rumbo de Zeta, pues queda la experiencia con los huracanes Wilma e Isidoro, que tras reportar que salieron de tierra de momento regresaron, causando más daños materiales.
Por José Luis López Quintal