La apertura de las playas ocasionó que la carretera Mérida-Progreso, registrara su mejor afluencia vehicular desde el inicio de la pandemia, pues de acuerdo con datos de la Secretaría de Seguridad Pública y de la Guardia Nacional, ayer esa vía registró de las 08:00 a las 14:00 horas, un aforo vehicular de 7 mil 500 vehículos.
Es decir, un promedio de mil 250 vehículos por hora y 20 por minuto.
En contraste, en el mismo periodo, se registraron 3 mil 200 automotores que venían de Progreso hacia Mérida, es decir, un promedio de 533 por hora y ocho por minuto.
Las autoridades policiales, indicaron que no se compara con los registros de un domingo normal, aunque sí fue la mejor afluencia que se había registrado desde el inicio de la pandemia.
En vacaciones de verano el aforo no supera los 5 mil vehículos en la jornada.
Por su parte, la Policía Municipal de Progreso, reportó que sólo registraron cuatro detenidos por escandalizar en la vía pública y un accidente sin lesionados.
Además, que en la carretera Hunucmá-Celestún, la Policía Municipal, reportó que se tuvo un aforo de mil 700 vehículos de 08:00 a 15:00 horas.
Es decir, se tuvo una afluencia de 242 por hora y cuatro por minuto.
Las corporaciones reportaron que la cantidad de vehículos son las que normalmente transitan en esa vía, de ida y vuelta.
Asimismo, reportaron saldo blanco.
Buen clima, pero playas revoltosas
En este segundo domingo playero de noviembre y después de abiertas, decenas de paseantes arribaron, quienes fueron recibidos por un agradable clima vespertino, actividad con la que se reactivó la economía local y el sector restaurantero.
Enrique Castro, restaurantero de este puerto, dio a conocer que la afluencia de visitantes fue mejor este domingo que el sábado, lo que genera creación de fuentes de empleo para meseros y garroteros.
Los meseros estuvieron muy activos este fin de semana en las playas de Progreso, debido a la ocupación de las mesas de los restaurantes, se les vio llevando cervezas y botanas para degustar frente al mar.
Con los paseantes disfrutando del mar los trovadores no perdieron la oportunidad de interpretar algunas melodías.
Bañistas se tiraron al Sol, a pesar de las grandes cantidades de sargazo, que arrojó el mar por los efectos del paso del Frente Frío Número 11.
La familia Contreras Pacheco, de la colonia Amapola en Mérida, dijo que después del encierro de varios meses, decidieron venir a divertirse a las playas el fin de semana.
Los giros que más movimiento registraron este fin de semana fueron los dedicados a las ventas de bebidas etílicas, como es el caso de los expendios de cervezas y las tiendas de autoservicio, donde se observó largas filas para las compras y llevarlas a las playas acompañadas de sus botanas.
Hospedaje, registra baja actividad
Mariano Cabrera, encargado de conocido hotel del malecón, dijo que en lo que respecta al movimiento hotelero, los visitantes que son de paso, algunos eran de Quintana Roo, y hasta de Veracruz, pero su pernocta la hacen en Mérida, y que llegan al puerto y disfrutan del ambiente de la playa, la comida, pero al llegar la noche regresan a la ciudad capital.
De las 20 habitaciones ayer sólo se ocuparon cuatro, por parejas que dijeron ser de los estados de Quintana Roo y Campeche, quienes descansaron y ayer a las 12:00 horas, entregaron las llaves.
En un recorrido por las playas del puerto se notó más afluencia que la que se observó el sábado pasado. Aún el mar continuó revuelto, pero los visitantes entraron al agua.
Fuentes de la Policía Municipal Coordinada dieron a conocer que ayer domingo por la tarde había más de mil 500 paseantes y llegaron a la costa unas 5 mil personas, superando los visitantes del sábado pasado a lo largo de la costa de Chuburná Puerto a Uaymitún.
La ausencia de los cubrebocas fue notoria en paseantes en el malecón de este Puerto.
Por David Chan Caamal y Julio Jiménez Mendoza