Con fugas de agua, poco utilizados o simplemente sin funcionar, es el aspecto general que tienen los módulos sanitarios que se dispusieron para higienizar a las personas a su paso por las calles del centro, desde que inició la pandemia, sin embargo, a más de 9 meses, pareciera que la estrategia ha dejado de funcionar, por lo menos esa es la percepción de la gente que solo ve correr el líquido, sin tener a ciencia cierta qué contiene.
Estas cabinas colocadas en diversos puntos del Centro Histórico no funcionan al cien por ciento, a pesar de que los tinacos están llenos de agua, se advierte que hay cadenas en las tapas de todos los bidones. El que está ubicado frente al área de Carnes entre el mercado Lucas de Gálvez y el San Benito permanentemente está tirando agua, la mayoría de las personas no lo usa. El arco del acceso a San Benito, no rocía agua constantemente, a pesar de que el tinaco está prácticamente lleno.
La cabina que se encuentra a la entrada del mercado Lucas de Gálvez no funciona, el personal del Ayuntamiento se realiza la toma de temperatura a algunos visitantes y brindan líquido antibacterial, aunque no funcionan los aspersores y el módulo carece de techo.
Los que están en el Pasaje a la Revolución, frente a Palacio de Gobierno y Palacio Municipal, sí funcionan los aspersores sin ningún inconveniente.
El módulo frente a la Casa de Montejo la bomba está desconectada por lo que no funcionan los aspersores, a pesar de que el tinaco está lleno. También se observa en la base del tinaco hay lama. Es la misma situación en los módulos ubicados en las calles 64 por 59 y 56 por 59, del Centro Histórico.
Se consultó a los regidores respecto a si conocían el monto del gasto de los lavamanos y los módulos sanitzantes y si conocían la situación física de estos.
Falta de mantenimiento
Algunos regidores coincidieron que esa decisión se tomó desde la presidencia municipal, por lo que desconocían el monto que se invierte en el mantenimiento de estos dispensadores, así como que no están enterados de lo que el Alcalde determinó en ese rubro, porque eso no pasó por Cabildo.
Antes esto, han pedido que se retomen las medidas de salubridad, que haya más vigilancia, “la integridad de los meridanos corre riesgo”. Estamos arriesgándonos a regresar a semáforo rojo porque no se está cumpliendo el protocolo, se pronunciaron a favor de concientizar a la gente, promover el uso del cubrebocas, mascarillas, e invitó a la población a tomar las medidas necesarias preventivas.
Lavamanos
Los lavamanos visitados están ubicados en la calle 65 por 60 tienen goteras, no cierra bien la llave, está sucio con hongos, no sale el agua y el otro sale muy poca agua, la lama está incluso en la llave. En la curva de la calle 56 por 67 y 69, por la zona de comida entre los mercados San Benito y Lucas de Gálvez, uno de los lavabos tiene verdín y una gotera, se han llevado el dispensador de jabón. El otro no está tan sucio.
En la calle 54 por 67 también hay lavamanos, ahí se baña un señor hasta do veces al día, utiliza el agua y el jabono que ahí se dispone, otro personaje lava carne y dejan un aroma desagradable, aunado a la basura que dejan las personas que por ahí pasan.
“No sabemos de dónde viene el señor que lava la carne, pero ya viene tarde, quizá la vuelva a vender, quizá sea de él, no lo sabemos, pero pone allá su bolsa y la empieza a lavar, uno le dice que no es para eso, se queda el olor, pero ya nos insultó una vez, para qué le seguimos, mejor cuando ya se va, le rociamos sanitizante. Ese señor también siempre viene a bañarse, pero nos ve y ya va para allá”, comentó Aleida López, quien tiene un local de flores en esa esquina.
En la confluencia de las calles 56 por 61, los lavamanos sí funcionan, pero están sucios, tienen lama y basura, mientras que en los ubicados en la calle 63 por 56, sí tienen agua, uno está tapado, no se va el agua, están muy sucios, incluso un dispensador de jabón está roto, sin producto. Como informamos ayer continúan sin llave los lavamanos del parque Eulogio Rosado, al igual que se encuentran sucios, pero sí tienen jabón.