Sin miedo al COVID-19, la gente inundó las calles del primer cuadro de Mérida, el mercado, así como supermercados, para comprar lo necesario para festejar la llegada del Año Nuevo.
La gente se olvidó de la sana distancia e incluso de la recomendación de únicamente celebrar con la familia nuclear, lo que quedó de manifiesto con las piñatas que llevaba la gente para romper en el festejo.
Su observó también una buena venta de bombitas, voladores y demás artefactos explosivos que se venden sobre la calle 57.
"La gente sí está comprando sus bombitas para festejar el Año Nuevo, aunque no como otros años, pero si hay algo de venta", expuso uno de los vendedores.
En el caso del mercado Lucas de Gálvez, como en los supermercados, las personas llegaron para comprar insumos para la cena y bebidas para acompañar.
Pareciera que la gente dejó a lo último las compras, pero fue así porque tuvieron que esperar el paso de la quincena pues los días anteriores no había dinero.
Se observa una importante presencia de la Policía de Mérida para prevenir cualquier contratiempo.