En lo que fue el último día del 2020, la movilidad vehicular y peatonal se vio fluida en el centro del Puerto de Progreso, donde la gente salió al mercado y a los comercios de la zona para las últimas compras del año.
El primer cuadro de la ciudad se vio aglomerado y la sana distancia se olvidó por parte de los lugareños. En los pasillos la gente se amontonó para encontrar la prenda o juguete de su agrado.
Se observó que las personas salieron a comprar parte de la cena de Año Nuevo y otros abarrotaron las tiendas de ropa, calzado, juguetes, plásticos, bisutería, entre otros.
La gente sale a la calle como si la pandemia ya hubiera cedido, sin embargo, otra parte trata de no asistir a lugares donde se acumulan las personas.
El centro de Progreso es de los lugares más visitados por turistas nacionales y extranjeros, quienes suelen ir a comer o adquirir algún recuerdo de la playa.
Comerciantes indicaron que la afluencia de gente ha sido mediana a comparación de años anteriores, pues algunos suelen recibir el Año Nuevo en el puerto.
El tránsito fue de lo más notable, pues en las esquinas más concurridas los vehículos tardaban en transitar por la gran cantidad de carros en la zona del centro.