Los niños Dilan Iván Manzanero Pool y Angel Uriel Pat Can, de 9 y 12 años de edad, respectivamente, cumplieron ayer sus sueños de pertenecer a las Fuerzas Armadas al ser nombrados “Soldados honorarios por un día”, durante emotiva ceremonia que se llevó a cabo en el patio central del 11o. Batallón de Infantería perteneciente a la X Región Militar.
El Capitán Primero de Infantería, Valente Revilla Ríos, fue el encargado de tomar la Protesta de Bandera a Dilan y a Angel, el primero padece distrofia muscular y el segundo espina bífida, quienes a pesar de tener que andar en silla de ruedas mostraron valor, entereza y fuerza para hacer realidad sus anhelos de ser soldados.
Portando el uniforme militar y con el brazalete del Plan DN-III-E, los dos pequeños participaron en el izamiento de la Bandera y los honores correspondientes, para después recibir los reconocimientos que los acreditaba como miembros honorarios del Ejército Mexicano.
Simulacro de incendio
Posteriormente, personal militar a cargo del Capitán Segundo de Infantería, Alan Peralta Sánchez, Jefe Accidental de la Sección de Instrucción, Información y Operaciones, condujo a los niños a un simulacro de incendio para que ellos mismos, a través de radios móviles, dirigieran la labor de auxilio para apagar el siniestro.
Con la felicidad reflejada en sus rostros y los radios en las manos, Dilan y Angel repetían el cambio y fuera para dar instrucciones a la central militar para la llegada del personal militar y proceder a sofocar la quemazón y a rescatar a dos pequeños heridos, escenificados por sus compañeros Kevin Moo Pool y Cristian Chin Petul.
Tras colocarle las vendas en cabeza y brazos, los niños heridos fueron subidos a una ambulancia del Ejército, la que también abordaron los dos soldados honorarios para concluir sus actividades.
Fortaleza, alegría y valor
Dilan es oriundo de Xocchel y estuvo acompañado por sus padres Ivette Pool Tun y Marcos Manzanero Puch, en tanto que Angel vive en Espita y lo llevó su madre María Lucrecia Chan May.
Durante la ceremonia, un soldado auxiliar leyó la Orden Extraordinaria, en la que se da a conocer al personal de jefes, oficiales y de tropa pertenecientes al 11o. Batallón, el nombramiento de los dos soldados, además de desearles que su estancia sea placentera y llena de experiencias.
–Este es un reconocimiento a su fortaleza, alegría, valor y entusiasmo para afrontar la vida y que nos sirven como ejemplo para demostrarnos que lo único imposible es aquello que no intentemos, deseándoles el mejor de los éxitos en compañía de sus seres queridos y apreciable familia, recordándoles que las puertas del 11o. Batallón de Infantería estarán abiertas siempre que ustedes lo requieran, aseveró.
También estuvieron los representantes de relaciones públicas del Centro de Rehabilitación e Inclusión Infantil de Yucatán, Ernesto Flamenco Irigoyen y Guillermo Ojeda Arellano.
(Rafael Mis Cobá)